Odio a los mister chollos aquellos que todo lo encuentran más barato que yo y más bonito, viajes, muebles, pisos, ropa, putas...
Odio a la gente que tiene la costumbre de estar con el móvil cuando estamos comiendo.
Odio a las putas personas que hacen ruido al comer...ya sin hablar de los que comen con la boca abierta y esas cosas...
Odio la gente que siempre se hace la víctima y que con cualquier tontería se ponen a llorar, en general cualquier muestra de debilidad me suele dar bastante asco.
Tías (y sí, esto solo lo hacen las tías) que cogen el ascensor para subir un piso de la uni.
NO
LO
ENTIENDO.
Odio a la gente que odia muchas cosas
Y a los putos grupos que van caminando lentisimo por la calle y bloquean todo el paso, ojalá verlos arder
Odio a todo el mundo, es más, si tuviese un botón delante de mis narices, el cual al pulsarlo mandaría a toda la humanidad al garete, tardaría 10 segundos en pulsarlo, primero va la risa malvada claro está.
¿Sabeis este tipo de gente que no mira alrededor para darse cuenta de que MOLESTA, y que tomando cualquier otro recorrido o simplemente apartándose un poco dejaría de molestar?.
Los que aparecen detrás siempre justo cuando vas a aparcar en un lugar chungo, y en vez de esperarse, se van pegando poquito a poco.
A la putas viejas que cuando llueve no se salen de debajo de la cornisa aún llevando paraguas aunque te hayan visto venir de frente y a ti se te haya olvidado.
Odio a las personas que no aceptan sus propios fallos, irresponsabilidades e ineptitudes y le echan la culpa a los demás.
Esto me ha pasado en una cena de compañeros de clase hace unos días:
Acordamos un menú de 22€ que incluye varios platos al centro, bebida y aperitivos. Como no hay platos individuales las cosas se reparten del palo: hay 10 croquetas para 10 que somos, tocamos a una por cabeza. Nadie tiene que decir eso, se entiende que si hay 10 y somos 10 es una para cada uno. Bueno pues así con todo y la bebida.
Resulta que siempre, en este tipo de eventos sociales, hay un facineroso que se dedica a joder ese equilibrio místico dado en los platos al centro y va el muy desgraciao/a y se come 2 croquetas cuando le tocaba una. Nadie te va a decir nada, no te van a crucificar ni va a morir ningún gatito por eso pero uno de los nuestros se va a quedar sin croqueta porque un egoista de los cojones se ha querido comer dos.
Ese tipo de gente... dejando de lado que el menú sea para pobres, que los 22€ en realidad los pagas por la bebida "barra libre"... esa clase de infraser no tiene lugar en el mundo para mi. Lo detesto y lo rechazo.
A ese tipo de gente y a todos los gitanos.
