El Fondo de Reserva complica todavía más las pensiones.

M

El Fondo de Reserva de la Seguridad Social española sale del ránking mundial de fondos de pensiones y su imparable acumulación de pérdidas dejan sus activos en mínimos históricos. Mientras tanto, la situación del Fondo siembra dudas sobre la sostenibilidad del propio sistema de pensiones en España.

El Fondo, que se sitúa así apenas por encima de los 25.000 millones de euros, marca un nuevo mínimo en la última década y acentúa su tendencia decreciente desde 2012. Solamente en los primeros siete meses de 2016 se han gastado casi 7.500 millones, y están previstos desembolsos adicionales de 9.700 millones hasta diciembre. Esto supondría una reducción total de 17.200 millones en un año, cifra récord desde la constitución del Fondo. Según las previsiones de la Autoridad Fiscal Independiente, de mantenerse la situación actual los recursos se agotarían por completo en 2019. Sin embargo, para analizar las causas de la situación actual, es necesario entender las fortalezas y debilidades del sistema de pensiones español que está en vigor desde 1963.

En muchos países (Estados Unidos, Canadá, Australia) existen sistemas de pensiones “de capitalización”, basados en el ahorro individual. En estos casos el Estado recibe las aportaciones periódicas de cada trabajador y las invierte en activos libres de riesgo. Llegada la edad de jubilación, el contribuyente comenzará a recibir el capital que ha aportado más los intereses generados a lo largo de su vida laboral. De esta manera se garantiza un sistema equitativo (ya que las prestaciones recibidas se corresponden directamente con lo cotizado) y sostenible a largo plazo, ya que las pensiones actuales no repercuten de ninguna manera sobre la población activa, cargando ésta solamente con los costes indirectos (sanidad, atención a la dependencia, etc.) del mantenimiento de la población retirada.

El sistema español actual, en cambio, puede clasificarse entre los que comúnmente se designan como “de reparto”. Esto significa que las aportaciones de los trabajadores activos (aunque computarán en el cálculo de las pensiones que a cada contribuyente corresponderán en el futuro) no son destinadas a los propios trabajadores sino al pago de pensiones de los ya retirados. De esta manera es la población activa quien asume todos los costes derivados del mantenimiento de la población jubilada, y la estabilidad del sistema depende exclusivamente de la cantidad de trabajadores en activo en relación a los retirados. Para prevenir un eventual impago de las pensiones en el futuro, en el año 2000 se constituyó en España el Fondo de Reserva, que acumulaba y reinvertía periódicamente los superávits anuales de la Seguridad Social. Sin embargo, ante la irrupción de la crisis las autoridades españolas han decidido disponer del Fondo para asegurar el pago de las pensiones, lo cual explica el descenso cada vez más pronunciado de sus activos. Pero el deterioro de las cuentas de la Seguridad Social, que han pasado del superávit al déficit, se debe a causas aún más complejas.

En primer lugar, es indudable que el aumento del desempleo (que pasó del 7,95% en 2007 al 20% actual) como consecuencia directa de la crisis ha tenido un doble efecto: por una parte, al destruir puestos de trabajo han disminuido las cotizaciones, mientras que el crecimiento del número de parados ha significado más demanda de prestaciones por desempleo. Dicho de otra manera, la caída del empleo ha significado para la Seguridad Social una reducción de sus ingresos y un aumento de los gastos. Es así como el superávit continuado del sistema se ha convertido, desde 2010, en un severo déficit crónico. En términos de sostenibilidad, en España el número de ocupados ha caído a 17,8 millones en el segundo trimestre de 2016 (con respecto a los 20 de 2007) mientras que los pensionistas han aumentado en 1 millón (de 7,5 a 8,5 en el mismo periodo). Esto significa que el país ha pasado de tener 2,7 cotizantes a 2,1 por cada jubilado.

Sin embargo, el nivel agregado de empleo (así como la relación entre contribuyentes y pensionistas) no puede explicar por sí solo el estado deficitario de la Seguridad Social. Si así fuera, la creación neta de empleo de los últimos tres años probablemente habría corregido el problema (al menos parcialmente) pero ha sido justamente en este periodo cuando más ha disminuido el Fondo de Reserva. La razón no es otra que la reducción de los salarios reales (con una caída del 2,7% en el sector privado) causada a su vez por una mayor flexibilidad laboral, por el aumento de los contratos temporales y a jornada parcial y porque los sectores de más alto valor añadido (como la tecnología) siguen siendo relativamente débiles en el conjunto de la economía española, dejando la mayor parte de la creación de empleo en manos de sectores (como el turismo) con poca cualificación y salarios bajos. Es así como la evolución de la economía en los últimos años ha dado lugar a un proceso de devaluación interna, la cual ha acabado por reducir los ingresos por cotizaciones ya que éstas van directamente ligadas a los salarios.

Por otra parte, si la destrucción de empleo y la devaluación interna han desestabilizado el sistema a corto plazo, existe un factor de riesgo mucho mayor a largo plazo, y es la propia evolución de la población española. En las últimas décadas, España experimentado una profunda transformación demográfica que ha convertido un país mayoritariamente joven en uno cada vez más envejecido, donde los fallecimientos ya comienzan a superar a los nacimientos. En este sentido, si en 1963 (año en el que se diseñó el actual sistema de pensiones) los menores de 19 años suponían más del 35% de la población, hoy no llegan al 19%. Por el contrario, los mayores de 65 años han pasado del 3,8% al 14% en el mismo periodo. No se trata simplemente de un aumento de la esperanza de vida, sino de una caída de la tasa de natalidad que ya ni siquiera asegura el relevo generacional. Si a esto añadimos otros factores como la emigración de los jóvenes (con el agravante de que los que abandonan el país suelen ser también los trabajadores más cualificados) el resultado es un sistema insostenible a largo plazo y cuyo deterioro se ha visto acelerado a causa de la crisis económica.

Por último, la gestión del Fondo de Reserva también ha dado lugar a dudas, ya que la mayor parte de los recursos (llegando al 97% en 2012) están invertidos en deuda pública española. Esto no solo supone un mayor riesgo debido a la falta de diversificación sino un importante coste de oportunidad en un entorno con tipos de interés en mínimos y los precios de los bonos al alza, como demuestra el hecho de que España ya emite títulos de deuda con rentabilidad negativa. En conclusión, la utilización del Fondo para financiar el déficit del Estado ha impedido invertir esos recursos en otros activos más rentables, limitando así los ingresos del sistema.

Ante una situación tan crítica como la actual los economistas han tomado diferentes posturas. Los más críticos consideran que el sistema de pensiones es en sí mismo inestable, ya que su sostenibilidad a largo plazo no se basa en los beneficios que es capaz de obtener con sus propios recursos sino con las aportaciones de los nuevos cotizantes: una estructura que, salvando las diferencias, se parece peligrosamente a las estafas piramidales, donde los beneficios de los accionistas no salen de la rentabilidad generada sino de las entradas de nuevos inversores. El problema es que estos sistemas suelen derrumbarse cuando ya no se encuentran inversores interesados y por lo tanto es imposible retribuir a los accionistas. Según este punto de vista, la Seguridad Social estaría en la misma situación (al ver reducidas las aportaciones de los nuevos cotizantes) y la única solución posible sería sustituir definitivamente el actual sistema de reparto por otro de capitalización.

Un enfoque alternativo pasaría por mantener el sistema actual, aunque reformando algunos de sus aspectos esenciales. Las propuestas van desde la creación de nuevos impuestos al aumento de las cotizaciones sociales, pasando por diversas fórmulas de reparto de gastos entre el Gobierno y la Seguridad Social. También existen modelos mixtos de reparto y capitalización (como los aplicados en Alemania y Holanda) que podrían garantizar una transición segura hacia un sistema más sostenible.

Por último, la disminución progresiva del número de nacimientos parece reclamar un mayor impulso a la natalidad. En algunos países de Europa se han puesto en marcha planes a largo plazo que incluyen ayudas a la maternidad, políticas de conciliación familiar e incentivos a familias numerosas. En España, sin embargo, el tema parece estar lejos del debate económico y los recursos destinados a las políticas familiares apenas suponen un 1,3% del PIB (la media europea se sitúa en el 2,2%), mientras que el nuevo marco laboral (con un 46,48% de paro juvenil, una mayor temporalidad y salarios más bajos) supone un freno para la creación de nuevas familias.

En cualquier caso, independientemente de los defectos del sistema actual es evidente que una población activa dedicada a actividades de bajo valor añadido será incapaz de asegurar a largo plazo un nivel de vida lo suficientemente elevado para la población inactiva, y menos aún si la relación numérica entre unos y otros sigue reduciéndose. El ejemplo de Grecia demuestra que una de las economías más atrasadas de la zona euro no podía pagar pensiones que suponían hasta el 96% del sueldo en activo (los jubilados alemanes, por ejemplo, no llegan al 70%). La razón es que, simplemente, la población activa no generaba el excedente necesario para financiar esas prestaciones. El caso griego podría servir como advertencia para que España busque la salida al problema de las pensiones a través de un aumento de la productividad y del valor añadido que permita al mismo tiempo un aumento del empleo y de los salarios. Hoy la mayor parte de los agentes políticos españoles buscan nuevas fórmulas de reparto y proponen seguir aumentando la presión fiscal sobre un sector privado ya muy castigado por la devaluación interna. Pero por desgracia, cuando una economía es incapaz de generar riqueza, el modo de repartirla resulta irrelevante.

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eXtreM3

Mayoría absoluta en diciembre.

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Cyph3r

Si ya tenemos problemas ahora , dentro de unos 10 años el sistema directamente explota en mil pedazos.

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KirK

Ahora que han matado a Pedrito y va a gobernar el PP no hay de qué preocuparse ya que nos estan sacando de la crisis y van a arreglar las pensiones tambien.

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Galian

yo ya tengo asimilado que no cobrare pension es mas tengo suerte si en unos años aun hay sanidad semigratuita xD lo mas probable es que me largue a otro pais y a tomar por culo

B

Yo con humor negro "dejo" ese problema a mi yo-viejo dado que creo que desarrollaré alzheimer y no me acordaré que estoy ultra-puteado.

Sin humor, me veo a mí mismo currando hasta morir, muy yayo y con la red de amistad muy tocada también (y yayos y ya sin aguantarnos ni los pedos). Resistiendo y gracias. Negándome a que me polimediquen y criticándolo todo (más aún y con más fuerza) y yendo a cualquier manifestación porque estaré aburrido de no poder hacer deporte o que me canse leer / me cueste concentrarme, etc...

Dudo que mi madre reciba pensión (tiene 42 años).

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BluSpock

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B

Si hay que hacer una guerra, hagámosla ya. Que como esperemos unas décadas, entre que los viejos se libran, y los jóvenes mueren, será todavía peor...

M

#7 No lo dice, como voy a saberlo? xD

Mientras sea poblacion poco cualificada, con salarios bajos y, en consecuencia, cotizacion baja pues...

Mar5ca1no7

#6 Tranquilo, puede que no te canses de leer, tu vision simplemente puede empeorar.

Yandr0s

No pasa nada, mientas tengamos dinero para rescatar bancos todo ira bien

Latted

Esta explicado perfectamente en #1

Déficit estructural. Tenemos una gran mayoría de puestos de trabajos de bajo nivel añadido, sumado a nuestra actual estructura demográfica va a hacer que en un futuro sea inviable.

Por mi parte, no tiene sentido mantener esta mierda de sistema. Ningún político va a querer comerse el marrón de cambiarlo, así que esperaremos a que explote, cosa que es algo que me la sopla bastante porque iba a percibir una mierda de jubilación por ser autónomo.

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AikonCWD

A mi lo que me jode es estar pagando actualmente la jubilación de los viejos actuales, sabiendo con certeza absoluta que el sistema explotará y a mi nadie me va a pagar la jubilación...

Joder, si saben que a partir de X generación no vamos a percibir jubilación, que nos quiten de pagar esos impuestos para que podamos destinarlos aun plan de jubilación privado, no?

3 3 respuestas
Headhunt

#12 Pero si el proyecto de país que quieren es el de un país de camareros dificilmente podremos llegar a tener trabajo de alto valor añadido.

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BluSpock

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Latted

#14 Es complicado crear puestos de trabajo mas allá del turismo.

Obviamente lo que han aprobado hoy con el impuesto de sociedades en el que las empresas tendran que adelantar el dinero (financiar al Estado) no va a ayudar a la inversión de las mismas, no esperéis milagros.

#15 Tengo la suficiente cabeza para poder guardar en una cuenta por mi cuenta un dinero para mi jubilación, no necesito a Estado paternalista detrás mio haciendo cosas que cualquier humano podría hacer.

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tosinaco

Todo va bien prems.

sacnoth

Id pensando cómo vais a hacer para cuidar de vuestros padres, porque a ellos tampoco les va a llegar el dinero.

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Von_Valiar

#16 En realidad es mas simple, hay varias opciones:

  • Subir cotizaciones sociales.
  • Recortar pensiones.
  • Cascar algun impuesto extra para las pensiones.

Combo de varias.

Aun asi #1 , las letras emitidas a interes negativo es algo reciente, el fondo de pensiones se 'invirtio' cuando se pagaban intereses del 3-5%, es decir, que no le afectara (o no deberia).

Lo de invertir en activos mas rentables, pues teniendo en cuenta que todas las commodities se han metido una hostia epica, ya me dira cual es el 'activo rentable'. xD

#18 Aqui se salvara quien tenga inmuebles con cierto valor para ser alquilados, ya sean comerciales o viviendas, quien no tenga nada lo pasara no muy bien y es posible que suponga una carga para la familia.

granaino127

El saqueo de la hucha, en mi opinión, es una trama para justificar su desaparición y la privatización de servicios.

¿Quién se va a enfrentar directamente a cargarse el estado de bienestar?...
Ahora si lo hacen "por necesidad" y encima pueden decir:
"esto es culpa de las políticas socialistas igual que la crisis, ¿veis como no se puede mantener? "

Y quedan como dios...

Hasta 2011 la hucha crecía y ahora en 4 años vaciada a más del 90% y al ritmo que va no llegan ni a 2017 lo que queda.

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Headhunt

#16 Una cosa es que sea dificil crear esos trabajos, y otra cosa es que enfoquen la educación hacia eso, como por ejemplo:

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Latted

#21 Ah vale, que ahora que la gente estudie ingles es porque quieren formar camareros.

Se te ve el plumero.

Edit: Si quieres responderme y buscas una contestación, que no sea con un vídeo de 35 segundos donde tergiversas lo que te da la gana.

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M

#20 Pero entiendes por que se esta vaciando? Igual la crisis economica que azota al mundo entero desde 2008 tiene algo que ver... xD

El sistema no es solo injusto (vas a cobrar en funcion de tu salario pero tambien en funcion de lo que produzca la poblacion activa cuando seas jubilado) sino que es inviable por el resto de factores que ya estan comentados (tasa de natalidad, emigracion de personas cualificadas etc).

punkypie

Mientras no nos falte dinero para la integración y la industria de género no hay nada de lo que debamos preocuparnos, tenemos prioridades que atender más importantes que a los Españoles

#3 ¿10? pues sumale el aumento de paro gracias a la sustitución de muchos puestos de trabajo por las nuevas maquinas y la IA

benjajim

Las pensiones de quien ? De los viejos cotizantes votadores del PP o de los maravillosos refugees que necesitamos para nuestro desarrollo?

Lo primero no importa pero si es lo segundo estamos jodidos.

Headhunt

#22 El plumero lo llevo siempre a la vista y si vamos a tener este tipo de debate, prefiero discutir sobre el precio de los gamusinos con la pared del baño.

Con ese video no busco que solo llegues a la conclusión del titulo, si no hacer ver que es lo que tienen en mente los políticos acerca de para que sirve una parte fundamental de la educación que son los idiomas extranjeros. En otros países, donde los políticos tienen otros objetivos para la educación habrían dicho "para que pueda entenderse con un ingeniero aleman acerca de automatización de su empresa", o "para que sea capaz de expresar y vender su idea a un inversor sea cual sea su nacionalidad", pero aquí ha elegido el ejemplo de poder poner un gin tonic con un perfecto acento de Oxford.

Creo que es objetivo que la política educativa desde hace varias legislaturas es rebajar los estudios superiores, hacerlos más generalistas, más inutiles y a la vez menos accesibles. Esto ultimo también es aplicable a la FP2, para un trabajo con alto valor añadido opino que no es estrictamente necesario tener carrera. Esto unido a las reformas laborales que reducen la calidad laboral y a la situación que vive mucha gente, es la receta perfecta para un país de camareros, pero de camareros de a 5€ la ración y de cubatas de garrafón, donde el mayor interés turístico es venirse aquí a emborracharse por cuatro duros.

CHiCoMaRTiNi

#16 hay una cosa que se llama inflacion guardar tu dinero en una cuenta no es la solución,por que en decadas habras perdido bastante poder adquisitico

2 respuestas
M

#27 A no ser que sea una cuenta deposito y le rente lo mismo que la subida del IPC.

Leoshito
#16Latted:

Tengo la suficiente cabeza para poder guardar en una cuenta por mi cuenta un dinero para mi jubilación, no necesito a Estado paternalista detrás mio haciendo cosas que cualquier humano podría hacer.

Mejor dicho, tienes suficiente dinero como para poder guardar en una cuenta por tu cuenta un dinero para tu jubiliación, mientras el "estado paternalista" te roba una parte para dársela a otros.

Aunque si te soy sincero ahora mismo no sé si lo que pagamos los autónomos también se gasta en las pensiones. Nosotros desde luego no tenemos.

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Latted

#27 I know, he dicho eso por no explayarme demasiado. No soy de tener el dinero parado en la cuenta.

#29 Eso lo he dicho pensando en el hipotético caso de que el Estado no quitara dinero para pagar las pensiones, cada persona podría guardar esa parte que ahora quita el Estado.

Nosotros cotizamos menos que un asalariado (aunque muchas veces aportemos mucho mas dinero con otros impuestos a la sociedad), por tanto también tendremos menos pensión, creo que la pensión media de los autónomos andaba por 600€/mes.

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