Aunque mi opinión genere polémica, como la propia artista ha provocado en el público, pienso dar mi opinión al respecto sin creerme experto de nada.
Gaditano y Andaluz, que ha crecido con el flamenco de fondo siempre encasillado en trajes de lunares, ferias y ensalzado por grandes de España como fueron Lola Flores, Camarón o Rocío Jurado.
El flamenco, género musical que a veces ha sido denostado, que con sus vertientes cómo la Copla se lo tachaba de facha durante el régimen de Franco.
En pleno siglo XXI dónde ya todo está inventado cómo la propia Rosalía humildemente dice, los españoles una vez más nos ponemos a tirar piedras sobre nuestro propio tejado.
Quedan muy bonitas frases cómo "la música no entiende de idiomas ni fronteras" cuando oyes J-Pop y te gusta e incluso emociona sin entender a priori lo que dice. Frases cómo "la música es una de las formas más puras de libertad de expresión".
Oímos trap, r&b, regueton, rock y metal en inglés, español o suomi, pop mexicano, jazz o soul de artistas argentinos... Ponemos la radio y oímos frases y letras de canciones denigrantes tanto de hombres como de mujeres que lideran listas de música mundiales. Alabamos al que fusiona, al que crea, al que marca tendencia, pero con Rosalía todos se enfrentan.
Una chavala joven que desde su adolescencia se ha formado en música y que sin ser andaluza (cosa que indigna a muchos) AMA y RESPETA al flamenco, que lo ha mamado y en el que se ha FORMADO. Artista inquieta que con respeto ha hecho de su libertad de expresión un trabajo intachable.
Cuando un japonés se forma para ser cantaor o cuando un africano se pone a bailar por bulerias nos hace gracia y es permisible. Qué bien que el flamenco traspase fronteras y guste y llegue a más gente. Género que estaba abocado al olvido, a permanecer estancado en la mente de los que algo hemos oído.
Pero ahora resulta que una discográfica o quien sea decide apostar por una cantante joven que fusiona estilos o palos del flamenco con otros nuevos géneros que no a todos acaban de gustar. ¿Pero que hay de malo en ello si además se hace con amor, humildad y respeto?
Solo hay que verla cantar en directo y ver como se emociona e incluso llora interpretando algún que otro tema de otro o suyo propio, para entender que para ella este proyecto es algo único, que su música le llega al alma.
Vemos a Beyonce usando elementos hindúes, a Kylie Minogue o Lady Gaga pasando del Pop al Country, a Rihanna de japonesa o a Katy Perry de faraona egipcia y no pasa nada. A Madonna haciendo de torera y con traje de luces en videoclips y Brits Awards, y a Cher vestida de Flamenca en Dove el amore. Pero viene Rosalía y usa elementos de la etnia gitana y se la apedrea. ¿Por qué? Yo soy payo y respeto y me encantan muchas cosas y elementos gitanos, no veo insultante que se usen elementos de una cultura para hacer algo creativo siempre que no se la insulte. ¿Apropiación cultural? Cuándo un drag queen de Canarias se viste de Virgen y Jesucristo y se le lleva a juicio por ofender al cristianismo todos salen en su defensa: es arte, es conceptual, no ofende, es puesta es escena, es show, es... Y ahí da igual que pueda o no ofender a algún creyente. Cuando alguien hace caricaturas de la Macarena o algun rapero insulta a la Monarquía se le defiende, pero a ésta mujer que no insulta y solo hace música si se la juzga.
El Mal Querer nace y se inspira en una novela anónima en occitano del siglo XIII titulada Flamenca, y ella en 2018 ha decidido adaptarlo musicalmente a su estilo. ¿Qué hay de malo en ello? Si yo al oírlo parece que me recitan poemas de Lorca con sonidos actuales.
Que si está hasta en la sopa, que si es hija no oficial del rey y disparates que se dicen porque se la ve actuar en la BBC o en Times Square. Que a saber a quién se la ha mamando para tanta promoción. ¿Pero estamos locos?
Puede gustarte o no, pero ante todo respeta.
Española que eleva un arte PATRIMONIO INMATERIAL DE LA HUMANIDAD a otro nivel. Diferente. Ni mejor ni peor. A su modo, a su manera, con su sentimiento. Usando elementos artísticos desde Goya hasta lo más cañí con elementos callejeros.
Contando una historia bien hilada con sentido y con empoderamiento femenino a los que algunos dicen y con lo que sólo se quedan: buaf es la primera vez que veo a alguien intentar cantar flamenco y encima en chándal!
Quizás deberíamos sentir un poco de orgullo de vernos con una promoción y proyección a la que no estamos acostumbrados. Quizás deberíamos ser mas abiertos de mente y saber dar oportunidades a gente joven que quiere innovar.
A mi personalmente este trabajo me ha enamorado y me ha hecho entender que la música no pertenece a nadie, que cada cual la ve y la siente a su manera.
Yo personalmente, y repito, sin ser experto, le doy las gracias. Desde su "Ponme la mano aquí Catalina" hasta su "Capitulo 11". Y espero que haya llegado al panorama musical para quedarse y que demuestre que no solo ha sido un fenómeno pasajero.
Y todo esto tras haberla rechazado al comienzo pero habiéndome dejado enamorar tras analizar su trayectoria y trabajo hecho.