DayZ: Centro de Información - Sigue el desarrollo al minuto

Se acerca el día de lanzamiento de la 1.0 de DayZ, y ya no se trata de defender o lapidar a una compañía, que ya son 5 años de supuesta estafa, de los constantes “ojalá, algún día, ya se verá”, y “de dejarlo morir en paz”, sino de apostar o no por una idea que pudo revolucionar el concepto del género de los videojuegos en línea por completo, influyendo desde los enfoques comerciales de muchas desarrolladoras hasta las preferencias de la comunidad en general de jugadores, y que este 13 de diciembre del 2018 puede que inicie una nueva fase en dicha revolución.

DayZ nació como un mod muy popular de Arma 2 que rompía esquemas en el concepto multijugador, volcándose verdaderamente en una experiencia única, inmersiva y realista, basada en la paranoia, la tensión, los encuentros fortuitos y en las interacciones sociales reales, crudas muchas veces, pero otras también muy satisfactorias, que cautivaron a muchos, todo ello en un mapa gigantesco para un juego en ese momento como era el de Chernarus.

DayZ fue un mod, apoyado posteriormente por Bohemia Interactive hasta el punto de apostar por crear un juego nuevo, independiente, basado en la idea inicial survival del mod pero intentando superar las limitaciones de su juego base, Arma 2. Este desarrollo no fue fácil, se fue posponiendo desde el principio. Pasó de querer lanzarse para finales de 2012 como DayZ “Standalone”, a empezar su early Access finalmente a finales del 2013, siguiendo con diferentes fases y retrasos por años, ya que no bastaba únicamente con cambios en el “netcode”, cambios en la gestión del loot o implementar la nube cliente-servidor.

Los desarrolladores se fueron dando cuenta durante el 2014, su primer año de early acces, de que había que purgar más profundamente gran parte del código de la arquitectura de Arma 2, que había evolucionado durante años desde los primeros títulos como Operation Flash Point y que ahora lastraba el desarrollo de DayZ. Se fue desechando dicho código, lo que no iban a aprovechar en una experiencia survival como la de DayZ, y quedándose con parte que sí, respecto a la simulación realista de los combates y balística de Arma 2, sobre todo. Pero esos problemas en su primer año de Alpha abierta no fueron visibilizados correctamente con la comunidad, empezando a dar una apariencia de desarrollo caótico con el hype, por un lado, y el hate, por otro, haciendo incomprensible el desarrollo para la inmensa mayoría.

A esto no ayudaba que se publicaran diversas hojas de ruta, la primera en forma de devblogs por parte del creador del mod, Dean Hall, donde se esperaba sacar DayZ para finales del 2012, y la segunda durante el 2015 por parte de Brian Hicks, ambos alejados ya por distintos motivos del desarrollo de DayZ. Con esas hojas de ruta en las que lo único que quedaba claro para la comunidad era que DayZ se alargaba en su desarrollo, daría la impresión de una evolución del mismo con signos inequívocos de caos, de agonía y muerte del desarrollo, calando esa idea hasta ahora. Para entonces el hate de la comunidad definitivamente enterraría por completo cualquier hype o esperanzas para finales del 2015, fecha que coincidiría con el último parche de la Alpha en cuanto a nuevo y esperado contenido, la 0.59, dejando una versión Alpha muy básica y casi inalterada en lo esencial por más 2 años respecto a vehículos, persistencia, zombis, etc.

Pero tan cierto es que el desarrollo de DayZ había tenido diferentes rumbos y cambios de enfoque, como que Bohemia Interactive no ha querido dejar de apoyar DayZ, que actualmente ya ha superado los 4 millones de copias, a pesar de los problemas en el desarrollo, a los que hay que sumar el empujón de ventas que se dio gracias a su popularidad inicial a Arma 3, y por supuesto a las copias ya vendidas de Arma 2 y sus expansiones con la era del DayZ mod. Bohemia Interactive terminó el desarrollo de Arma 3 en septiembre del 2013 y ahí no iba a dejar de desarrollar videojuegos, por muy caótico que pudiera verse el desarrollo de DayZ Standalone en su primer año y medio de early access, y para mediados del 2015, en mitad del caos, con una comunidad de DayZ completamente frustrada, Bohemia Interactive y los desarrolladores de DayZ, los cuales se habían multiplicado por varias decenas, apostarían definitivamente por el cambio profundo de arquitectura.

Este nuevo cambio que no se vería hasta la 0.60 en junio del 2016 con la llegada de Enfusion Engine, conllevó profundos cambios en la relación del servidor y el cliente, y mejoras de rendimiento hasta duplicarlo en muchos escenarios. Es la época clave, ya que, si hay un momento en el que de verdad de DayZ podía haber muerto, era este. A pesar de que desde la 0.59 (12/11/2015) la percepción mayoritariamente negativa de la comunidad no había cambiado, DayZ creció internamente acercándose a lo que finalmente se conocería con las primeras versiones experimentales de la Beta 0.63 en abril del 2018. Los cambios en arquitectura, motor, control y animaciones del personaje visiblemente eran muy profundos, pero quedaban completamente ensombrecidos ante la falta de contenido respecto a versiones anteriores de la Alpha 0.62, parche que venía a ser una 0.59 pero funcionando en parte con el motor Enfusion Engine. En la Beta 0.63 había menos tipos de armas, menos mecánicas de supervivencia que en la Alpha como los arcos y la pesca, en sus versiones experimentales iniciales además no había si quiera vehículos, y aunque había más zombis y habían solucionado muchos de sus errores, habían surgido otros nuevos.

Era como si se avanzara y se retrocediera a la vez. Pero realmente se estaba avanzando en lo más difícil e importante, y retrocediendo temporalmente en contenido que dependía de lo primero y más importante, una arquitectura con funcionalidades y pilares maestros estables. En 2017 Bohemia Interactive da como fecha límite para salir del early Access final de 2018, y ya entrados en este año una idea inicial de salir DayZ en más plataformas como consolas se hace realidad al llegar al programa Xbox Game Preview de Xbox One. Por fin nos acercamos a finales de año y se desata la enésima polémica de cara a la comunidad, DayZ saldrá si o sí a finales del 2018, pero no llegará en su versión inicial con contenido tan esperado como los helicópteros y gran variedad de vehículos terrestres, sistemas avanzados de supervivencia, enfermedad entre otros (para más detalles consultar este enlace), los cuales según los desarrolladores llegarían con actualizaciones posteriores a lo largo del 2019.

Y es en este punto en el que nos encontramos exactamente. A las puertas de una 1.0 capada en contenido, con una comunidad frustrada por tantos años de retrasos y confusión, una versión a la vez estable y robusta en lo más importante, pero muy vulnerable en bugs menores, los cuales todos juntos sin duda darán una impresión de juego completamente roto y por ende definitivamente muerto para muchos. Sin embargo, la lista de juegos lanzados así es bastante grande, y algunos a pesar del hate inmenso producido se han acabado o incluso redimido en parte de cara a la misma comunidad que en un principio los lapidaba. A DayZ podría o no pasarle eso, pero tiene algo que además le diferencia del resto. Su propio concepto genuino e inalterable de mundo libre, abierto, donde cada partida puede ser diferente y única, donde según la personalidad, carisma, y las habilidades del jugador previas dictaminará su propia experiencia en cómo lidiar con el entorno, a su capacidad real de supervivencia en cuanto al pve y pvp.

DayZ es diferente por el modding, y por sus infinitas posibilidades ahora que ha seguido realmente en desarrollo, creciendo y mejorando en sus pilares maestros, y porque a pesar de no haber tenido un desarrollo modélico, es un juego que rompió esquemas siendo un mero mod de supervivencia en un apocalipsis zombi, con un juego base de simulación bélica como era Arma 2. DayZ es diferente porque su concepto no ha sido desechado hasta el punto de que otras desarrolladoras han visto un buen filón y han intentado llevar a cabo esa misma idea, con muy pocos éxitos y ninguna acercándose realmente a una experiencia igualmente inmersiva y adictiva como lo fue en sus comienzos. Ahora empieza una nueva era, con un comienzo accidentado con gran cantidad de problemas iniciales, pero con un futuro alentador por delante.