Ir a ver pobres - "Poorism"

B

Me he encontrado con este artículo de opinión, del periódico de Extremadura, y es que muchos lo habréis visto no por instragramer famosetes, sino incluso entre conocidos vuestros (en mi experiencia personal, yo esto lo ví de una compañera de universidad hace diez años), noticia que enlazada, copio también:

Se llama «slumming» o «poorism», y consiste en organizar visitas turísticas por los barrios más miserables de ciudades como Bombay o Rio de Janeiro. Los organizadores prometen una experiencia inolvidable –con las pertinentes medidas de seguridad– o, al menos, la ocasión de hacerse un selfi junto a una favela o un grupo de niños de la calle antes de volverse a la piscina del hotel.

En el Emoya Luxury Hotel and Spa, en Sudáfrica, ofrecen todavía algo más que ir a ver pobres: vivir como ellos en un verdadero Shanty Town (barrio de chabolas) construido allí mismo y al que no le falta detalle: fachadas de uralita, barriles de latón y neumáticos para hacer fuego, caño exterior de agua para lavarse... Todo, por supuesto, opcional, pues por dentro las «chabolas» disponen de todas las comodidades imaginables.

Este tipo de turismo no es, por cierto, un fenómeno menor: Dharavi, el suburbio más pobre y superpoblado de Bombay es ya, según TripAdvisor, el destino favorito de quienes visitan la India, por encima del Taj Mahal y otros lugares emblemáticos. ¿Cómo explicar esto?

Sería curioso observar, antes de nada, las similitudes entre el turismo y otros fenómenos de entretenimiento y consumo de masas como la televisión. Así, no parece descabellado comparar el poorism con los programas televisivos en que se recrean, con toda sordidez, peleas, rupturas de pareja, despidos, autopsias u operaciones policiales. ¿No hay detrás un mismo afán por el espectáculo y por captar clientes en un entorno en el que el tradicional turismo de monumentos parece ya tan desfasado como los «programas culturales» de la tele?

En cualquier caso, ya se trate de la telerrealidad o del slumming, ¿qué explica el éxito de esta tendencia ultra pornográfica a enseñarlo y profanarlo todo que se ha apoderado del espectáculo? Una respuesta simple puede ser la facilidad con que cabe satisfacer, hoy, ese mínimo afán aventurero y máximo de curiosidad superficial y morbosa que define nuestra condición más básica. Así, lo que antes representaba un costoso «viaje alternativo» para el típico «BoBo» (burgués bohemio de clase media alta) que rechazaba el viaje organizado y buscaba compartir la vida de los lugareños, ahora se vendería como un paquete estandarizado al alcance de todos en las versiones más zafias del slumming o la oferta de fin de semana en el Shanty Town del hotel.

Pero más allá de la novelería turística (heredera cutre de ese interés por lo pintoresco en que radican el gusto por los viajes y por la «cultura popular» –o su idealización– entre las clases altas), el poorism y fenómenos similares responden seguramente también a otros elementos característicos de nuestro tiempo. Uno de ellos es la obsesión –tan anglosajona y puritana– por la transparencia. Transparencia no ya referida a la política o la empresa, o al ideal de vigilancia absoluta en nuestras sociedades del Big Data, sino también a la completa impudicia con que el «sistema» muestra hoy sus miserias –demostrando, a la vez, que no hay lugar fuera de foco por el que salirse del juego que las genera–.

Ahora bien, todo es hoy tan visible –dicen algunos críticos de esta «sociedad de la transparencia»– que resulta casi imposible ver nada. Más que herramientas para la representación y el análisis, las cámaras (y uno de sus vehículos, el turista) son hoy –como dice Hito Steyerl– herramientas de desaparición y olvido. La fotografía, la tele, el tour... son formas de borrar el mundo. Paradójicamente, tanta impostura «realista» genera un ansia de autenticidad que parece desfogarse, como en un círculo, en una exigencia aún más visceral y primaria de realidad –y así el reality extremo, la obsesión por lo «orgánico», el porno amateur y cuasi ginecológico, los juegos adolescentes con la muerte, o... el slumming–.

En cualquier caso, con lo que el poorism no tiene nada que ver es con una «toma de conciencia» social, ni con la confirmación de esa patética moraleja del «son pobres, pero más felices que nosotros». Prueba de que el viaje turístico no sirve para aprender nada es que los que sueltan esta parida no se quedan allí donde, según ellos, reina la felicidad. Tan bobos no son.


*Profesor de Filosofía.


A mí la verdad que me encanta el breve artículo, que tampoco es necesario comentar porque sería caer en la redundancia pues lo da todo bastante mascado, pero si quiero señalar algo que me encanta, y es lo gilipollas que se están volviendo las sociedades occidentales. ¿que gracia tiene sacarte una foto con un crío lleno de mierda y con ropa harapienta? ¿Y me refiero a que satisfacción obtiene un turista a sacarse una foto así? La única respuesta es, como dice el autor, el enseñarlo todo y en mi opinión, proyectar una imagen que podrá ser diferente a como eres en realidad, como si de Dorian Gray se tratase, tú a ese niño no le vas a solucionar una mierda, ni siquiera te va a importar que ayer no comiese, tu vas y te sacas una foto.

Es posible que este tema ya haya salido, me suena un cojón de veces pero si es la primera ver que ya veo el concepto anglosajón de este tipo de turismo, Poorism o Slumming, lo que no sabía yo ya es que esto ha trascendido y ahora es un destino turístico el visitar barrios deprimidos económicamente, vamos pobres de toda la vida, y es que flipo, la verdad que se me ha quedado cara de gilipollas al leerlo y me cuesta creer que al gente consuma esta mierda, y aquí meto mi cuña amorosa a la capacidad del capitalismo de mercantilizar hasta la pobreza xDDD pero no es objeto del debate propuesto en realidad, ya que la premisa de la que parto es la decadencia moral de la sociedad.

18
eondev

Como en el siglo 19 cuando iban a ver a los negritos como si fuesen animales xdddddd

13 1 respuesta
Zakram

Me lo apunto para las vacaciones.

5
meeka
#1Angelius:

...tu a ese niño no le vas a solucionar una mierda, ni siquiera te va a importar que ayer no comiese, tu vas y te sacas una foto.

Durísimo y cierto. Estoy hasta las pelotas de las fotos rodeados de negritos de gente que sólo va a pasar el mesecito, o la ruta por el país subdesarrollado de turno, pero que quieren demostrar a todo el mundo a su alrededor, lo 'concienciados' y sociales que son.

Qué asco.

31 3 respuestas
B

Attwhorism.

4
Fascaso

La virgen, no sabía de esto y es atróz.

2
B

El problema es que los pobres de verdad son ellos que tienen que andar con esas mierdas.

El turismo hay que controlarlo porque no vale todo y españa tiene que dejar de ser la putita de europa. Para ser la scort de lujo de europa

A

no me parece muy diferente a los que se iban a África a hacerse fotos en aldeas y similares.

PD.- esto es el nuevo turismo sostenible en la Barcelona de dentro de 10 años? ahuyentas al turista del montón y solo vienen ricachones en coches blindados y los llevas por barrios conflictivos a que vean apuñalamientos :P

1 respuesta
NoRelaX

Gracias por las gafas Dulceida

4
SwarkO1

La mierda de vida que tiene que tener la gente para que entre sus opciones de turisteo esté el visitar una favela para hacerse la foto de turno

4
vinilester

#8 "Le devolvemos su dinero si no se lleva una puñalada"

1 respuesta
A

#11 para eso esta después el parque temático con sangre falsa y un suelo limpio donde tirarte en el suelo y que hagan siluetas de tiza.

En la zona de Safari atraen varios grupos de menas con carteras y moviles atados con hilo de pesca y en el momento que se juntan 2 manadas distintas dejan caer un par de navajas.

1
Leelah

Un artículo muy interesante. Gracias por compartirlo.

No entiendo que la gente emplee su tiempo y dinero en ver la miseria humana ¿Con qué fin? ¿Ser más conscientes de la suerte que han tenido de nacer donde han nacido? ¿O para regodearse en la desgracia ajena? ¿Para ser más cool por seguir una moda? Supongo que va en relación al "tanatoturismo" (o como se diga) y buscan cosas similares🤷‍♀️

En países como la India no hace falta buscar la pobreza, ella te encuentra. Y no sé qué placer pueden encontrar para ir buscándolo adrede. Entiendo a la gente que va en un proyecto o que quiere llevar una ayuda en mano para asegurarse de que le llega a quien lo necesita... pero no va de eso este artículo😐

Ulmo

Solo veo un escalón más de lo que ya era gran parte del turismo de toda la vida. Siempre que la gente ha hecho viajes a, por ejemplo, la India, el mayor atractivo ha sido pasearse por barrios destrozados y hacerse fotos rodeados de pobreza. La única diferencia con lo que menciona el artículo es que ahora también hacen hoteles temáticos donde tú mismo simulas ser pobre.

Yo, personalmente, en mis viajes voy a ver paisajes naturales, animales o grandes construcciones llevadas a cabo por la humanidad, pero siempre he aborrecido el típico viajes de "vamos a hablar con los lugareños y conocer su estilo de vida". Sinceramente, me importa bien poco el estilo de vida de un random que viva a miles de kilómetros. Para mi desgracia, mi mujer es el polo opuesto.

heyjoe

Esto me recuerda a una especie de movimiento de protesta que se hizo por RRSS desde Noruega que se quejaba de las típicas mujeres rubias occidentales que van a África a hacerse fotos con niños negros dándoles agua para beber o algo así. Usaban muñecas Barbies para caricaturizar a estas tipas.

Edit, la encontré:

Barbie Saviour, la cuenta en Instagram que critica el postureo de los voluntarios en África
https://www.losreplicantes.com/articulos/barbie-savior-cuenta-instagram-critica-postureo-voluntarios-africa/

1 1 respuesta
Ryok

La hipocresía y la mentira disfraza de bienquedismo rancio para ganar likes y alimentar su ego por su falta de autoestima y necesidad de atención. Nada nuevo bajo el sol. "La verdad que el viaje al Congo me ha cambiado la forma de ver el mundo. ¿Te vienes al rooftop de Gran Vía y te enseño las fotos mientras nos tomamos unas copas?"

Lo único en lo que se molestan es en intentar justificar sus falsos motivos con una máscara de rancia y evidente ficticia caridad cuando es un secreto a voces el porqué lo hacen. Luego ponemos dos tweets cuando aparece un niño flotando en la playa o nos ponemos la bandera de Francia en Facebook para que se vea nuestra preocupación y a otra cosa mariposa, que la gente ya sabe que existo.

Semejante falta de conciencia y el individualismo exacerbado in crescendo están llevando esta sociedad a la puta mierda. Si no fuera porque mucha gente saca curro posteando sus trabajos en las RR.SS. las prohibiría tranquilamente. Menudo jodido cáncer que no hacen más que agilipollar aún más a los gilipollas.

1
Lexor

tienes seguro por si se intentan acercar a ti?
esto se daba ya en africa, las aldeas mas turisticas falsean sus ritos para hacerlos mas espectaculares y vistosos
al final acaban traicionando su historia por unos dolares un dia tras otro y como es tan lucrativo lo anteponen a su estilo de vida tradicional pero sin ir adaptandose a un estilo de vida mas estable que ser un puto circo

2 respuestas
B

Vaya por delante, por completar mi opinión, que yo al menos no critico (o no pretendo) que alguien se quiera perder en una ciudad/pueblo/poblado y ver el estilo de vida de un país o sociedad concreto, puedes buscar una forma de conocer haciendo turismo más de cerca como vive una sociedad concreta perfectamente y no tener ese ansia o deseo. Lo que quiero resaltar es ese afán de ver pobreza desde tu escaparate particular, y sin romper el escaparte, pretender mezclarte en ella mediante una foto o una experiencia de 5 minutos, que es lo que ofrecen visitas guiadas a barrios jodidos, y lo digo por #17 tu puedes ir perfectamente a Bolivia y ver parajes naturales y pararte con la gente del lugar, lo que me escama es como se ha convertido eso en una oferta turística, que al menos para mi, es el elemento que lo diferencia.

#15 a mi también me ha recordado a eso xD

2
rackinck

Pues voy a hacer de abogado del diablo. Si la intención es intentar entender a los más pobres me parece una actividad con beneficio social. Por una parte, porque permite eliminar tópicos e ideas preconcebidas sobre el modo de vida y las condiciones en las que viven. Segundo, porque permiten entender sus preferencias y aspiraciones, y por tanto podría ayudar a cambiar la presión social hacia políticas que ayuden realmente a esos colectivos y no a lo que se cree de forma preconcebida que necesitan. Tercero, porque imagino que parte de ese dinero que se usa para visitarlos acaba siendo dejado en esas zonas pobres, incrementando sus ingresos y ayudando a mejorar sus vidas.

Puede ser una estupidez, pero mientras esos colectivos salgan beneficiados de ello voluntariamente, pues adelante.

2 1 respuesta
B

#19 cojo el centro medido a la cabeza y remato.

Entiendo que aquí ellos no saldrían beneficiados, sino que son el producto. Pero lo que planteas no es descabellado y podría tener su reflejo y lado positivo, como indicas.

1 respuesta
Manorothh

#17 como los vascos

rackinck

#20 Lógicamente habrá opiniones mixtas como en todo. Pero por ejemplo, este artículo habla de otros factores que no mencioné pero que son importantes, como que incrementa la conciencia de que estas zonas existen y no se cubren, ayuda a incrementar la conectividad para facilitar el acceso de turistas (y lógicamente eso beneficia a los habitantes de estos barrios, que pueden acceder más fácilmente al mercado de trabajo), suelen estar vinculados a operaciones de ONGs y otras obras de caridad, etc.

PD: de hecho parece que a nivel de apoyo directo el efecto es más bien escaso, pero que los beneficios vienen más a través de visualización, conexión e infraestructuras...

1 1 respuesta
sergioRG

A alguno conozco que ha hecho esto y luego se escaquea de ir a cuidar a su abuela porque les parte la tarde en dos o dejan de lado a amigos de toda la vida cuando tienen problemas de dinero, drogas o lo que sea.

1
B

Estas en el tinder suelen llevar el fotopack rodeada de niños negros + haciendo yoga con una puesta de sol. Pueden ir a por el triple combo entrando a un templo con un pañuelo en la cabeza o mas yoga en la playa.

9
StkR

#4 en relación al topic y en especial a tu comentario, recomiendo el libro “Blanco bueno busca negro pobre”, un análisis de esas situaciones e inercias a las que nos ha llevado el tema de la “cooperación”, con anécdotas que dan entre risa y pena por lo absurdo del mundo en que vivimos.

1
Renardo

/r/humansoflatecapitalism

tute07011988

El turismo es otra de las plagas que ha creado el ser humano que altera el planeta. Espacios naturales abarrotados y altamente contaminados directa e indirectamente por el turismo. Centros urbanos alterados y musealizados para el goce del viajero y la penitencia del autóctono. Tribus "aborígenes" que no son más que una atracción de un parque temático. Rutas en parajes naturales que alteran la naturaleza del mismo para que cuatro entrepeneurs puedan hacer fotos a animales salvajes. Ciudades destinadas a la desaparición del modelo actual por sobrepasar su capacidad de carga. Ciudades copia de otras ciudades. Turistas que acuden a la miseria para sentirse mejor consigo mismos tras volver al lujo.

¿Qué coño importa esto? Da dinero y en Instagram queda guay.

4
B

#22 me he leido por encima el artículo, y no tiene por que ser malo en su totalidad como dije, pero esa curiosidad y la capacidad de mercantilizar la misma me sorprende,

Y dejo fuera a oenegés o programas de acción, tu vas allí ayudas con tu caridad y será diferente el debate sobre si es buena o mala la caridad. Y el propio artículo creo que lo indica bien con lo que antes era un mochilero: ese mínimo afán aventurero y máximo de curiosidad superficial y morbosa que define nuestra condición más básica. Así, lo que antes representaba un costoso «viaje alternativo» para el típico «BoBo» (burgués bohemio de clase media alta) que rechazaba el viaje organizado y buscaba compartir la vida de los lugareños, ahora se vendería como un paquete estandarizado al alcance de todos en las versiones más zafias del slumming o la oferta de fin de semana en el Shanty Town del hotel

PD: de hecho parece que a nivel de apoyo directo el efecto es más bien escaso, pero que los beneficios vienen más a través de visualización, conexión e infraestructuras... Y esto me cuesta verlo, pero lo desconozco más allá de ser una afirmación de ese artículo sin mucho fundamento, pues si te puedo llevar al turista autobús y traerlo de la misma manera, poca infraestructura se generará, más allá de una carretera (sino existía ya).

Serpentino

#4 exacto, la caridad es anónima si no es vanidad

Juana de Arco

1
ManOwaR

#2 no hace falta irse al siglo XIX, en el siglo XXI lo hicieron reality con programas estilo perdidos en la tribu.

1 1 respuesta

Usuarios habituales