La Real Federación Española de Fútbol (RFEF) financió al Atlético de Madrid con once millones de euros a cuenta de los pagos de la UEFA por la participación del equipo en competición europea.
En la página 22 de las cuentas depositadas por la RFEF en el Registro Mercantil de Madrid figura el apunte contable por el que el organismo adelantó tres millones y medio de euros en 2012 y otros siete millones y medio en 2013. La auditora de las cuentas federativas advirtió que esta financiación no era una práctica correcta.
El Atlético fue el único club que recibió dinero por adelantado de la RFEF, porque el resto de los créditos a corto plazo otorgados por el organismo son todos a las Territoriales. Entre los beneficiarios en 2013 figuran Extremadura (2.329 euros), Andalucía (159.999), Asturias (12.000), Baleares (30.000), Cantabria (94.020), Galicia (180.000) y Valencia (50.400).
Los pagarés del Atlético eran admitidos por la RFEF, porque adelantaba así parte de los ingresos que el club obtiene por su participación en la competición europea, dinero que la UEFA envía a los clubes por medio de la propia RFEF. La fecha de vencimiento de los pagarés es anterior a la fecha prevista para los pagos de la UEFA.
La RFEF recibía el dinero y, en el caso del Atlético, le retenía las cantidades adelantadas. Al advertir la auditoría que la praxis no es correcta, la RFEF deberá cesar con este instrumento de financiación. Se comprobará si ha sido así en las próximas cuentas anuales federativas.
Hacienda. Del mismo modo que el Atlético obtuvo anticipos por parte de la RFEF a cuenta de los ingresos en torneos europeos, la RFEF los consiguió de la propia UEFA, que adelantó parte de los pagos a la Federación. Recibió trece millones de euros a cuenta de los ingresos generados por los derechos de televisión en las competiciones europeas por los distintos clubes españoles.
La UEFA decidió en 2012 congelar los ingresos de varios clubes europeos. En España fueron los casos del Atlético y del Málaga. Ambos tenían cuentas pendientes con Hacienda. El Atlético emitió entonces un comunicado en el que aseguró que cumplía con “todos y cada uno de los requisitos exigidos por el Reglamento de Licencia UEFA y Juego Limpio Financiero para participar en las competiciones europeas”. La congelación cautelar de sus ingresos europeos fue levantada tras presentar un calendario de pagos con la Agencia Tributaria que ha ido cumpliendo en los plazos exigidos.
En el informe del último auditor federativo, Gescontrol, figuran dos salvedades. Una hace referencia al proyecto para un centro de formación deportiva que genera doce millones de euros en el pasivo del balance. La segunda se refiere a la resolución del contrato con Santa Mónica, donde se advierte de cinco millones de euros de “compleja recuperación”.
La RFEF es una entidad privada de utilidad pública. Las últimas cuentas reflejan un saldo positivo de 2,17 millones de euros, cantidad que hay que sumar a los beneficios del ejercicio anterior, que fueron de 5,3 millones.
Durante los últimos años, en paralelo a los éxitos de la Selección en las Eurocopas de 2008 y 2012 y en el Mundial 2010, los ingresos federativos crecieron de forma significativa. En las próximas cuentas se comprobará el impacto económico negativo que tuvo la eliminación de La Roja en Brasil 2014 y las consecuencias del ese Mundial en los contratos con los patrocinadores.
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