Vereis.. tengo 20 años... y hará cerca de 10 meses empecé a salir con una chica, lo típico, una semana de rollo y al tiempo pués la cosa se puso seria... Fueron unos meses perfectos, los mejores diría yo, pero este último mes las cosas se torcieron, estuvo rara durante unas semanas.
Ella decía que era el estres, por el tema de los exámenes... Pero al poco tiempo, me dijo que ya no teníamos nada en común, que no estaba cómoda, la seguí, fui un pesado encima de ella hasta que me dijo que la verdadera razón es que era un inmaduro que no miraba a su futuro... Al poco tiempo me dijo que podíamos ser amigos y que a ver si la cosa iba bien, si era así volvíamos, pero no fue así ya que, como muchas personas, cuando me cabreo digo las cosas sin pensar, y en esa ocasión le dije que solo estaba conmigo para olvidar a su ex (ya la había cagado antes, pero esta vez fue definitivo).
Con dos huevazos me planté en su instituto y le pedí perrdón y le dije que podíamos ser amigos, que me diera al menos esa oportunidad y que iría muy lento si era necesario, a lo que ella dijo que no sabía... Pués bueno, a la noche, salió otra vez el tema de estar juntos y me dijo que no había posibilidad, que ya no me amaba, cuando me dijo eso no me lo podía creer, era inverosímil, ¿dejar de amar a una persona d ela noche a la mañana? Me arrastré como naddie, me tragué mi orgullo, le supliqué, y aún así me dijo que no me amaba, que yo me había encargado de destruir todo eso con mis palabras y que ni siquiera podíamos ser amigos porque no quería que sufriese...
La cuestión es que ahora sin ella estoy bastante perdido, gracias a ella me empecé a mover, a labrarme un futuro (no tengo título, imaginaos), había preguntado en centros, autoescuelas... etc... Y ahora sin ella... las cosas están jodidas, no sé ni qué hacer.. Esta mañana le dije que aceptaba su respuesta, pero que me volviese a perdonar (por tener la conciencia limpia), aún espero su respuesta. Sé que no volveremos, pero estar con ella fue... maravilloso, y aún conserva mis regalos. mis colgantes, todo, como si fuera un regalo cualquiera. Cosa que yo no hago. Vivo en una isla, es decir, que no tardaré en encontrármela de casualidad, y, no quiero eso, no quiero levantarme por la mañana y que ella sea mi primer pensamiento, encima al estar con ella dejé en el camino a amigos y colegas, con los que ahora podría contar para salir y despejarme...
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