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«La Junta presiona a los docentes para que aprueben a más alumnos»
M. J. PERERA / SEVILLA
Día 19/08/2014 - 10.37h
«La Consejería de Educación ha encontrado una vía rápida para enfrentar el fracaso escolar en Andalucía»
—¿Cuál es el problema de fondo de la educación en los institutos de Secundaria de Andalucía?
–Que es bastante deficiente, entre otras cosas porque se ha abandonado el tema de la excelencia y el esfuerzo. Tenemos una ESOque circula a ras de suelo. Los datos estadísticos sobre educación evidencian que Andalucía está en los últimos puestos tanto cualitativamente como cuantitativamente.
–Pues la Junta quita importancia al informe PISA.
–Los datos están ahí y basta con compararlos con otras comunidades o países para saber que las cosas no van bien en el sistema educativo de Andalucía.
–¿Las estadísticas oficiales del fracaso escolar son una pesadilla para la Consejería de Educación?
–No se si una pesadilla para la Junta, pero el fracaso escolar es una realidad real y contundente. La Consejería de Educación ha encontrado una forma vía rápida y anormal de enfrentarse al fracaso escolar estructural presionando a los profesores o fabricando los llamados «aprobados de despacho».
–El Plan de Calidad permitía a los profesores ganar 3.000 euros más en cuatro años por aprobar más. ¿Era un sistema perverso?
–El Plan de Calidad está difunto tras varias sentencias y porque la mayor parte de los profesores no lo veía claro porque en cierto modo ninguneaba su labor porque premiaba al profesor que más alumnos aprobaba, cuando la cosa no es aprobar más sino que haya un proceso de enseñanza que funcione.
–APIA ha presentado un recurso ante la Audiencia Provincial contra el archivo de la denuncia que presentó contra el delegado provincial de Educación de la Junta por otorgar el título de ESO a un alumno que tenía cuatro asignaturas suspendidas en el instituto Los Álamos de Bormujos. ¿Ese caso es una excepción?
–Esto es una muestra de algo que está sucediendo ahora masivamente. Se está favoreciendo que los alumnos a final de curso, principalmente en Secundaria, reclamen las notas para obtener el título aunque tengan cuatro asignatura suspensas. Esa reclamación va a la delegación provincial y allí se fijan en cualquier detalle administrativo para regalarle el aprobado.
–¿Las comisiones provinciales de reclamación están nombradas a dedo?
–Hay un enorme oscurantismo sobre el funcionamiento de esas comisione. No sabemos quiénes forman parte de ellas, qué recursos usan para atender las reclamaciones... Lo normal es que las reclamación se hagan sobre la prueba final o sobre la evolución del alumno en el curso pero las comisiones no están haciendo eso, sino que se agarran a cualquier error administrativo o defecto de forma para aprobar al estudiante, cuando eso no tiene nada tienen que ver con el fondo del asunto, que es si ese chico ha aprendido. Eso provoca una desmoralización total de los profesores... y de los alumnos que han aprobado justamente.
–¿De quién es la culpa del fracaso escolar?
–Como tenemos una ESO obligatoria, nos encontramos con estudiantes motivados y otros no. Abordar eso requiere recursos y tiempo, y a veces no da los resultados esperados, por lo que se recurre al aprobado general, lo más cómodo.
–La Asociación de Profesores de Instituto de Andalucía asegura que la Junta ha optado por echaros encima a los inspectores para aumentar l número de aprobados.
–Sí. Asustan a los profesores pidiéndoles documentación y dándoles a entender que no están haciendo las cosas correctamente. Esto está relacionado con los planes provinciales de inspección. La Junta no los facilita porque dice que es información confidencial y hemos tenido que recurrir a los tribunales para conocerlos. Queremos saber si la Intervención está actuando correctamente y cuál es realmente su labor. Un inspector no está sólo para ver si un profesor aprueba mucho o poco.
–¿Está diciendo que los inspectores se comportan como una policía política?
–Da la sensación de que la inspección se ha convertido en una especie de brazo político de la Consejería, cuyo fin principal y casi exclusivo es que aumente el número de aprobados como sea. No conozco ningún caso en que la Inspección actúe en los casos opuestos: cuando se regalan los aprobados de una forma bochornosa. Yo he visto cursos súper problemáticos, en los que están suspendidos muchos alumnos, y la varita mágica llega en junio aprobado a todos. ¿Por qué no interviene ahí la Inspección?
–¿Cómo interpreta que un profesor tenga un número mayor de suspensos que de aprobados?
–Puede significar muchas cosas. Puede ser que sea estricto, que no ejerza bien su labor o que tenga un alumnado que llega de Primaria con un nivel tan bajo que por mucho que se empeñe es imposible aprobarlo.
«Hay alumnos en 1º de ESO con un nivel por los suelos»
-¿En Primaria se promociona de forma automática y el fracaso escolar aflora en la ESO?
–Tampoco es así. Hay profesores de Primaria que son excelentes profesionales pero también es verdad que es más sencillo darle a un alumno de 6º de Primaria el aprobado aunque no lo merezca porque no ha alcanzado los objetivos de las asignaturas y de esa forma se lleva debajo del brazo sus problemas a la Educación Secundaria. Hay alumnos que llegan a 1º de ESO con unos niveles por los suelos de inglés, de matemáticas, de lengua... Y ahora tú tienes que ponerlos a un nivel que tendrían que tendrían que haber llegado en 3º o 4º de Primaria. No está culpando con ello a la Educación Primera pero planteo algo que es más común de lo que parece.
http://sevilla.abc.es/sevilla/20140819/sevi-junta-presiona-docentes-para-201408191033.html
