FEDAchat - Quarantine Edition


Malaspiojos

Hola 🍀

Soulscx

buenos dias desde la capital

Polakoooo

Te has vuelto a Quito?

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Soulscx

ojala

Wei-Yu

ojala

vene-nemesis

Juan no estás siento un poQuito racista?

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abath666

Segunda vez que roban en mi pueblo en menos de una semana. Y eso que el dia 20 pillaron al ladrón en plena faena.

Con lo fácil que seria meterles un mochazo y dejarlos enterrados en cualquier sitio.

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Lan0s

#29767 hacía como 15 años que no escuchaba la palabra mochazo

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GlatoR

Ahí se demuestra lo viejo que somos, lanos

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abath666

#29768 Ahora estoy recuperando palabras de mi pueblo que habia perdido en mi vocabulario.

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ThOrKeMaD

David Testal: «Sin afecto nos morimos. Ese es uno de los límites que hay que reconocer para ejercer la libertad»

​David Testal se dedica de forma autodidacta al permanente estudio del ser humano, enfocado sobre todo en la percepción onírica y en la narración mítica como creadora de realidades personales y colectivas. Además de escritor y cineasta, lleva inmerso veinte años en una profunda investigación psicológica a través de sus consultas privadas de Tarot, y es asesor en procesos artísticos y en estrategia discursiva. Actualmente da forma a su segundo libro y, partiendo de una serie de siete talleres de pensamiento que llevaba tres años impartiendo, ha creado la No-Escuela de Alta Magia y Libertad, la cual propone unir todas sus investigaciones en una enseñanza en continuo desarrollo, enfocada en la responsabilidad del individuo y en su capacidad para crearse un alma libre.

Acudimos a su encuentro con gran ilusión por conocerlo e intrigadas. Y descubrimos a una persona muy libre en su manera de mirar la vida, que nos escuchaba atentamente y no perdía su alegría cuando había incomprensión, Gracias, David, por tu tremenda generosidad con nosotras. Fue un placer conocerte y poder profundizar sobre la vida con tu ayuda y hacernos preguntas. Esperamos que vosotros también lo disfrutéis.


En tu vida, ¿qué crees que es lo que más te hace libre? ¿Y cómo ha afectado el confinamiento a tu libertad?

Para mí la libertad no tiene que ver con las aparentes limitaciones externas, sino con nuestra forma de pensarlas y con nuestra respuesta a ellas. Si tuviese que ver, sería imposible ser libre, puesto que para empezar tenemos un cuerpo humano, una biología determinada y unas determinadas circunstancias en cada momento. La libertad que más me interesa es la que se ejerce dentro de esos límites inevitables, la voluntad que sabe responsabilizarse y transformar cualquier circunstancia en algo útil. Por eso no puedo responder a qué me hace libre, pues nada puede hacerme libre, sólo yo puedo ejercer o no mi libertad. O dicho de otra manera: lo que me hace libre es esta idea de libertad a la que decido atenerme.

Así entendida la libertad, ni siquiera si me metieran en la cárcel podrían arrebatármela. El confinamiento en todo caso me ha servido para estimularla. Desde niño he pensado así, quizás por ser hijo único y tímido, lo que me ha hecho que tuviese que aprender a disfrutar estando solo y a ejercitar profundamente la imaginación. Cada vez que me encuentro con unos límites, intento no gastar ni un ápice de energía en lamentarme por habérmelos encontrado, y me dedico a utilizarlos de la forma más benéfica posible. Y eso he tratado de hacer.

Con todo esto no quiero decir que sea conformista y dócil, más bien todo lo contrario, ni que me desentienda de la injusticia que supone que otros pretendan arrebatarnos nuestra libertad. Pero si la concibes tal y como he explicado, te sentirás mucho más fuerte a la hora de enfrentar las amenazas, pues sabrás siempre que por mucho que logren limitarte, jamás tendrán poder real sobre ti. Y al sentirte interiormente más libre, serás mucho más efectivo combatiendo a cualquiera que pretenda interponerse en tu camino. Siempre recuerdo algo que cuenta Antonio Escohotado sobre lo que decidió hacer cuando lo metieron en la cárcel. Pidió al parecer que lo llevaran a una celda de aislamiento. Allí escribió su Historia General de las Drogas que lo hizo famoso en todo el mundo. Utilizó unos límites impuestos a su favor, utilizó un encierro para expandirse. Eso es para mí ser libre.

¿De qué eres o has sido en tu vida más esclavo?

De mi vehemencia y mi a veces estúpida rigurosidad. Digo “a veces” porque también me ha servido para pensar mejor, al igual que la vehemencia me ha servido a veces para expresarme mejor. Pero en muchas ocasiones no he sabido dominarlas y me han hecho ser brusco o injusto con las personas que más quiero. También me ha dolido desde niño sentir que no me escuchaban, no por indiferencia, eso no me importaba, sino cuando detectaba que no sabían responderme y dejaba de interesarles escuchar. Hay quienes prefieren huir antes de admitir una derrota, eso me sacaba de quicio. Cuando discutía con un adulto, yo lo perseguía por toda la casa, no consentía que rehuyera el debate. Era un poco insoportable. Y aún hoy, en discusiones íntimas, a veces me cuesta soltar la yugular. Conforme pasan los años, los tengo más domados, pero estos son mis caballos salvajes.

¿Podemos llegar a ser libres dadas nuestras limitaciones?, ¿nuestras limitaciones nos determinan?, ¿qué libertad podemos conseguir?

De alguna manera, ya os he respondido a esto en la primera pregunta. No nos determinan nuestras limitaciones, sino lo que decidimos hacer con ellas, lo que aprendemos de ellas. No se trata de si podemos o no ser libres dadas nuestras limitaciones, pues es sólo dentro de nuestras limitaciones donde podemos ejercer nuestra libertad, y donde gracias a ejercerla podemos ir expandiendo a su vez esas limitaciones. Si sabemos utilizarlas a nuestro favor, entonces podemos incluso ser más libres gracias a ellas.

Dice André Aciman que lo mejor de la vida es la intimidad: “Es lo que recuerdo, lo que anhelo, lo que elogio en la vida: cuando estás casi -nunca puedes estarlo totalmente- en la intimidad con alguien. Pero sois casi uno, sois la misma persona. Y eso es un sentimiento maravilloso, porque no hay desconfianza, no hay vacilación, no hay represión. Nada. Todo está abierto. Y es un sentimiento liberador, un sentimiento maravilloso: sentir que no tienes de qué avergonzarte”. ¿Cómo se relacionan en tu experiencia la libertad y la vulnerabilidad?

Sin reconocer los propios límites no podemos sentirnos libres, puesto que, como he explicado antes, la libertad se ejerce siempre dentro de esos límites, los cuales se pueden a veces incluso expandir, pero para ello también es necesario reconocerlos antes, igual que para dejar de ser esclavo primero hay que reconocer serlo, igual que para rebelarse hay que reconocer antes el orden establecido.

Si no reconoces tus límites, en vez de utilizarlos a tu favor te estrellarás contra ellos una y otra vez, y te sentirás aprisionado. Si dentro de la cárcel, en vez de sentarte a escribir un libro, te lamentas y te das cabezazos contra la pared, eres tú quien está convirtiendo en prisión lo que podrías estar convirtiendo en una austera residencia artística o en un monasterio, por ejemplo.

¿Por qué aclaro esto antes de responder? Porque la vulnerabilidad es también un límite. No somos invulnerables, podemos ser heridos de distintas formas. Eso no afecta a nuestra libertad, puesto que lo importante es cómo afrontamos y utilizamos esa debilidad, qué decisiones tomamos siendo conscientes de ella. Podemos optar por algo que sabemos que puede herirnos y estar dispuestos a asumir las consecuencias, o podemos decidir protegernos y no arriesgarnos. Ser libre no es ser invulnerable, es asumir la responsabilidad de arriesgarte o no, habiendo reconocido la propia debilidad. Lo cual, paradójicamente, te fortalece y te hace menos vulnerable.

Por otro lado, y en cuanto a vuestra cita, la primera intimidad para mí ha sido siempre conmigo. Considero peligroso depender de ese encuentro con alguien para sentir esa íntima liberación, porque entonces algo en ti temerá siempre perder esa libertad si esa persona un día no estuviese. Es estar esclavizado a una relación que nos hace sentir libres. Sin embargo, si yo me siento libre sin necesidad de encontrarme íntimamente contigo, aportaré mi libertad a nuestra relación si nos encontramos, no te impondré mi dependencia, y ambos nos sentiremos más libres. Soy yo quien tiene que perder la vergüenza ante mí, para ir con la vergüenza ya perdida me encuentre con quien me encuentre.

¿Es posible liberarse del deseo de ser querido?, ¿o es reconociéndose querido cuando se hace posible la libertad?

El deseo de ser queridos es inherente al ser humano. Sin afecto nos morimos. Ese es uno de los límites que hay que reconocer para ejercer la libertad. Ahora bien, es imposible ser libre si mendigamos amor. Buscar ser queridos suele conllevar ser menos queridos, pues solemos rehuir a las personas dependientes que anhelan que las queramos. Son un incordio.

Para sentirnos libres debemos ser valientes y actuar en coherencia con quienes somos, pese a quien pese. Eso requiere estar dispuestos a perder el amor de todos aquellos a quienes estamos evitando molestar. Y es entonces, sin embargo, cuando nos encontramos con el amor de aquellos con quienes nos sentimos libres. De hecho, las personas que nos retiran su afecto cuando nos atrevemos a ser quienes somos, en realidad no nos querían, querían a la persona que estábamos fingiendo ser, no a nosotros.

Así que no, no es posible liberarse del deseo de ser querido en abstracto, pero es posible liberarse del deseo de ser querido por determinadas personas. Si quieres ser querido por aquellos cuyo amor no afectará a tu libertad, debes estar dispuesto a que te dejen de querer aquellos cuyo supuesto amor temes perder.

¿Hasta qué punto es posible sentirse bien cuando nos sentimos verdaderamente solos?, ¿cómo se relacionan la libertad y la soledad en tu experiencia personal?

Para mí la soledad, el hacer de ella mi paraíso, ha sido el pilar fundamental de mi libertad. Desde niño he estado mucho tiempo solo. Siempre prefería el refugio de mis libros, de mi música, de mis construcciones y mis dibujos, de las películas que inventaba y en las que interpretaba todos los personajes. Siempre he preferido los juegos solitarios a los juegos de equipo, y me incomodaba y aburría competir con otros. Sin embargo, organizaba yo solo partidos de fútbol en mi habitación con una pelota de tenis e imaginaba ser cada jugador de ambos equipos enfrentados. Y cuando murió mi abuelo, que era con quien jugaba al ajedrez, comencé a jugar partidas contra mí mismo. Esta independencia largamente ejercitada, sumada a que siempre me sentí querido y respetado a la hora de vivirla, me vacunó de alguna manera contra la búsqueda de aceptación. Incluso me he sentido siempre mejor apartándome de los grupos, que siempre he percibido como rebaños que intentaban vampirizarme. Cuando me preguntan cómo puedo mantenerme tan libre, siempre respondo: porque no te necesito. Y precisamente porque no te necesito, nunca pretenderé retenerte ni chantajearte para que te sientas mal si decides apartarte de mí, y tú siempre sabrás que si estoy contigo es porque realmente quiero estar, nunca porque crea que debo estar o porque quiera utilizarte para algo.

Si no te sientes bien solo, jamás te sentirás libre, pues aunque estés rodeado de gente toda tu vida, siempre sabrás que dependes de ellos, e intentarás retenerlos, y te agarrarás a clavos ardiendo para no quedarte solo, y rogarás que se queden junto a ti incluso quienes te hacen daño. Sólo quien se sentiría satisfecho estando solo está preparado para tener una relación profunda y libre con otro.

¿Cómo querer al otro libre?

Si no quieres al otro libre, no lo quieres.

¿Cómo se relacionan la libertad y el perdón en tu experiencia personal?

El perdón es un término interesante y peligroso en mi opinión. Se refiere a la remisión de una deuda o una pena, y por ello es contrario a la responsabilidad, te exime de ella, cuando es la responsabilidad el principal alimento de la libertad.

Algunos seguro que me dirán que una cosa no quita la otra, que se puede pedir perdón y antes o después también responsabilizarse. Pero ateniéndonos al significado de las palabras, el cual tiene efectos profundos en nuestra psique, diría que sí, que una cosa necesariamente quita la otra. Si te perdonan antes de responsabilizarte, has sido eximido de cualquier deuda, con lo cual no queda nada por lo que responsabilizarse, a no ser que el perdón fuese falso. Por otra parte, si el perdón llega después de responsabilizarte, el perdón es una humillación, pues la deuda ya estaba saldada mediante tu reparación, y por tanto no quedaba nada que perdonar, ninguna deuda de la cual poder eximirte, con lo cual el perdón era innecesario. He visto cómo muchas relaciones de todo tipo resuelven problemas enquistados gracias a entender al fin esto y actuar en consecuencia.

Pareciera que cuando nos perdonan nos liberan. Y lo que hacemos es contraer de hecho una deuda mayor, pues nos sentiremos obligados a perdonar mañana a quien hoy nos perdona, normalmente por cosas aún más graves de aquellas por las que nosotros hemos sido perdonados. Así el perdón esclaviza mutuamente, no restaura el orden, aun siendo lo que en apariencia busca. “Perdóname” suele significar “líbrame de la culpa para no tener que responsabilizarme”. Pero al no responsabilizarte, pierdes libertad.

Personalmente nunca he pretendido esclavizar a nadie dándole mi perdón. Si alguien se arrepiente de algo que supuestamente te ha hecho, lo más generoso es poner un precio a ese supuesto daño (en forma de acción o de bien material). Un precio que simbólicamente restaure en ti el daño recibido, y que ofrezca a la otra persona la oportunidad de sentir que repara el daño, dejando la deuda zanjada también en su interior. Así se sentirá libre del daño que ha causado sin necesidad de sufrir la inútil culpa.

Y si yo me arrepiento de algo que le hecho a otra persona, de inmediato trato de ofrecerme para reparar ese daño de la forma que pactemos. Responsabilizándome me libero así de toda deuda y compenso al otro su dolor, librándolo también de su peso. No lo cargo encima con mi culpa, exhibiendo lo mal que me siento por lo que he hecho, obligándolo a decidir si me perdona o no. No me interesa el perdón de nadie, me interesa si cree que puedo hacer algo por arreglarlo. Si no, tendré que asumir que esa persona no quiera volver a verme, que me odie, que piense mal de mí, que su recuerdo de mí no sea agradable. Tendré que asumirlo y marcharme, sabiendo que su perdón no serviría para nada, sabiendo que sin poder responsabilizarme por lo que he hecho, nunca podría ser libre a su lado. E igual sucede con ese “perdonarse” uno a sí mismo. Yo no tengo que perdonarme por nada, tengo que responsabilizarme de todo cuanto decido si quiero ser libre.

Soulscx

muy interesante, sobre todo la parte del mochazo

Wei-Yu

imagen de estar aterrado por el wall of text

OutMyAshes

soy teen de nuevo

sacnoth

#29770 ¿Puedes poner ejemplos? ¿Tú también dices sosca, tupir o jiede?

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abath666

#29775 Decia cosas como peñizcar, asin, farraguas, acutar, ripia, estrevedes, segureja, angarilla, gujero, pitera...

sacnoth

¿Pitera es brecha? Esa la digo yo también.

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Wei-Yu

acutar qué es? porque aquí es reservae y hasta donde yo sé es bable

1 respuesta
abath666

#29777 Se suele usar más para herida.

#29778 Si, seria algo como reservar, guardar. Por ejemplo de que te levantas y le pides al de que se sienta a tu lado que te acute el sitio para que no te lo quiten.

O los niños jugando que cantan: "Acutaremos la calle, que no pase nadie. Que solo pase mi abuela, comiendo ciruelas...:

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ArticoDelSur

Me gusta la gente que se ofende cuando les haces comentarios para picarles cuando ellos lo hacen todo el rato

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NoRelaX

yo si que soy teen de nuevo que me he puesto a escuchar SKA-P

Fxcking
#29779abath666:

O los niños jugando que cantan: "Acutaremos la calle, que no pase nadie. Que solo pase mi abuela, comiendo ciruelas...:

Vaya tremenda mierda de canción

ercabesa

Ska p es de gente que no se ducha

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B

luego soy yo

Fxcking

#29783 Y de posturetas

abath666

Y todavia estaba la guardia civil a esta hora buscando huellas y demás del robo. Y uno que estaba bien gordo diciendo: Bueno, sin estas cosas este pueblo seria aburrido.

B

centu abandonando el fedachat para siempre:

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ArticoDelSur

Pray for Centu

1 1 respuesta
NoRelaX

que coño acabo de ver

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B

qué hago yo que ya me sé todo el temario estas dos semanas que van a tardar en ponerme el examen? xd

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