'Diablo III' abre una trágica noticia, una de esas cosas que no deberían ocurrir pero, desafortunadamente, ocurren, sobre todo con juegos de Blizzard como 'World of Wacraft': Russel Shirley, de 32 años, ha fallecido tras tres días seguidos jugando.
Sherley tenía sobrepeso, no hacía deporte, tenía problemas de salud y su dieta no era óptima. Todo esto sumado a un exceso de horas delante del ordenador, llevando una vida completamente sedentaria, acabó con su corazón. Pero no hay que equivocarse: los videojuegos no son culpables de esto, sino nosotros mismos, que muchas veces actuamos de forma inconsciente y absurda. Precaución, amigo jugador: por mucho que nos guste ludar frente a la pantalla, hay que hacer deporte, comer sano y tomar el aire, salir con los amigos y, en definitiva, no suicidarnos vegetativamente. Jugar, sí, pero con moderación.
¿Qué opinais?