Hala, aprovecho para reunir todos los posts hasta aquí:
Érase una vez un murciano con un gran ano que te comió el nabo que sabía raro. Fin.
Hilo cerrado cuando de repente abrio los ojos mientra entonaba con voz grave «tengo hambre», y autofelandose la polla, le dio un calambre. Fin.
¡Hola!, dijó mientras se atragantaba con la polla:
«Yoo yoooo
Vengo de Siria al estado alemán
Donde no veas la pasta que me dan
Me toco los huevos todo el dia sin parar
Y por la noches, a una viejas me gusta atracar.
Los blancos se encargan de protegerme
La policia ni hace el amago de detenerme
Mi barrio cada dia se parece mas a Raqqah
Lo unico que me interesa en esta vida es la Paga»
Ahora que ya he desayunado, me daré una ducha pero antes tiraré un ñordo igual de grande que mi cabeza y lo guardare en una bolsita para revelar la esencia del sentido de la vida. Andando por la calle me encontre otro ñordo en otra bolsa y... del patriarcado me di cuenta que era mi mismo ñordo, pero no podía ser, de pronto me percaté de que soy inevitable.
«Vaya post de mierda» pensaba mientras cagaba. Así que imprimí los comentarios y me limpié el culo con ellos. Y le dije:
«Escúchame tío, que yo no soy un niño, tío, yo no soy un niño, tío, yo no estoy pa que me hagan perder el tiempo. ¿Me entiendes? Que es lo que me hace perder tu gente. Ya está primo, que si eres tan bravo tío, cuando quieras quedas conmigo, hermano. Y yo sí sé como funcionan hermano. Aquí hay walthers, hay 38s, hermano, hay 9mm, hay lo que quieras, compadre. Yo no sé qué tú te estás pensando que es esto, compadre, THIS IS THE JUNGLE, NIGGA. Escúchame, es que, es que ya me está tocando la polla, tío, estás tonterías, de tu coro de niños pequeños, tío, que escúchame, que venga, primo, que venga aquí a la calle Aguilón nº9, primo. Que venga ya tu colega si es tan bravo, que ayer me tuvo ahí esperando, compadre, hasta la 1 y media de la noche, hermano, y no vino ni Dios. ¿Qué pasa con tu rollo, sois tan bravos, primo? Pues si sois tan bravos, vente, vente de verdad, hermano. Estuve ayer con mi colega, primo y es que menos mal que no te encontré, chivato de mierda, porque estuve con mi colega dando vueltas por ahí con el coche, con la pistola, maricón. ¿Tú con quién te piensas que estás hablando, pipudo? ¿Eh? Ts. Y es que has tenido hasta suerte, maricón, te ha venido hasta bien, el que no vinieras, porque es que te hubiera metido un tiro en la rodilla, payaso, que eres un payaso.»
A lo que el me contestó: «Mec, mec» Pero todo resultó ser un sueño de Nobita, el autista que tenia un gato de amigo imaginario. Ese gato fue el creador de la mejor poesía que jamás ha existido, dice así: «Un humilde servidor, al amanecer anterior al de ayer, estaba presente cual anonadado predisgitador, sentado en mi yurbe, vi a un individuo al fondo de mi estrecha calle. Había vuelto el pregonero».
Con grandes aires y tremendos huevos que previamente sacó de su bolsillo mágico le dijo a Nobita: «En mi mano derecha tengo un huevo azul, en la izquierda, uno rojo. Elige el que te quieras comer». A lo que Nobita respondió: «Prefiero comerme los huevos que tienes ahí abajo, pájaro».
Entonces se arrodillo y le comió los huevos tan ricamente que Doraemon evolucionó a Metalgreymon y de una vehemente eyaculación le reventó la cabeza a Nobita y entonces con los dedos de la mano lo baneaste.
Se puso a tocarse el ano con el guantelete del infinito; entonces se llevó la mano a la naríz y tras degustar el olor chascó los dedos. Y todos los italianos murieron. Y le respondieron:
«Sabes perfectamente que eso de blanquear dinero no es verdad. Y no contento con ello vienes aquí, al grupo, a crear crispación. Solo para regodearte de las respuestas que obtengas, evidentemente en contra de tu posicionamiento que sabes erróneo.
»No, esto no es gracioso. Tu falta de sensibilidad hacia este tema hace que mucha gente se sienta mal. De acuerdo que eso es nuestro grupo de amigos, pero hay cosas que pueden traspasar la pantalla del móvil y herir el orgullo de quien te lea. Tú has pasado una barrera que no debías y por eso me causas poco menos que repugnancia.
»Voy a respetarte a nivel personal, porque sé que en definitiva, solo tratas de divertirte a costa ajena, aunque con dudoso gusto. Por otra parte, te agradecería de que dejaras de considerarte amigo mío. Un saludo, espero que recapacites y no vuelvas a hacerlo.»
Y sin comerlo ni beberlo llegué a ser el chuleta de un barrio llamado Villa Alcazabilla, lugar de extensos campos y bellas mujeres cercano a la orilla del mar.
Y allí, se tumbo en el suelo aun lleno de césped y de barro, mas mirando al cielo, pensó en qué era lo que había comido para haber hecho tanto de vientre. «Cual profundidad mi ano puede llenar, tanto cague que hasta la cosecha fertilicé». Mientras observaba mi obra, di yo cuenta de cuanta belleza puede albergar uno en su interior. Aquel olor me transportaba a mi más tierna infancia donde en mi mas tierna juventud me ganaba la vida buscando semillas sin digerir en unas letrinas de Nueva Delhi.
Recuerdo una vez cuando me comi una semilla y de repente empezo a crecerme la mano, crecía tanto y tanto que casi no podía ni agarrarme la otra mano, y es que realmente necesitaba ambas si quería agarrarme la otra mano, para asi poder finalmente agarrarme finalmente la gran cabeza de hindú que tengo. el médico me dijo que tenía una cabeza demasiado grande y que por eso me dí cuenta de que Hitler no hizo nada malo porque me agarró bien fuerte de la pilila y la acerco a su axila lo cuál fue un poco extraño porque yo en realidad quería que me la acercara a la barbilla.
Le preparé un sandwich de tortilla con un poco de zumo de hombre de cosecha propia, entonces el niño que había amordazado la noche anterior me comió las lentejas y pidió repetir, pero no pudo ser porque entonces recordé qué lo que de verdad queria era beber otra clase de zumo, concretamente lejía con amoniaco, para entonces ya pasada la medianoche me la comiste a troche y moche.
Cuando sin previo aviso una tribu de indígenas amazónicos nunca antes identificados entraron por la puerta. Después de mirarme con intensidad el jefe de la tribu el paquete durante un rato susurró «y pum se convirtieron en chocapic», gran metáfora para expresar el pajote que se acababa de hacer pensando en mujeres completas. Se agacho a por jabon y la mujer completa le dio amor con su trompeta mientras decia: «zi me guzta mamamio».
Mientras todo esto pasaba habia un negro detras de la mujer completa metiendole el extintor en la terraza pues todos sabemos que lo importante es coger buen color, y más ahora que viene el veranito, con sus sartencitas y frigo pies, guiris como langostas y extranjeras jamonas, cocidas al son del sol y la cerveza.
Encontrabame yo saliendo de comprarme un calippo de limón en un kiosko cuando finalmente lo cambie por un calipo del carne del dicho vendedor, entonces me desperté. Todo había sido una horrible pesadilla, estaba oscuro y sudaba demasiado, podría ser por aquél cubata que me pasó mi colega que podría haber estado aliñado, maldito hijo de puta, me día la vuelta en la cama y le comí toda la polla a mi colega para momentos después recordar que justo ese día había quedado con otro colega para comerle la polla a el pero iba a sobrepasar el límite de pollas que te puedes comer al año, así que decidí seguir siendo hetero y, con el sabor a lefa todavía en mi garganta, me fui a comerme una tercera polla porque justo era 1 de enero.
Pero esta polla era demasiado grande, me ahogué al hacer deepthroat y morí, fin. O eso creia pero apareció jesucristo y me resucitó de un par de pollazos en la frente y aparecí en mitad de jerusalen, ahora soy mesias, todos me toman por un dios, entonces aproveche ese poder y acabé con el hambre en el mundo. No sin antes meterme ciento y pico de vena en alcohol.
