Supongo que a ustedes, mis tertulianos, les habrá pasado eso de tener ciertos conocimientos de informática básica. Dichos conocimientos suelen trasmitirse rápido, como el fuego en una papelería, y fruto de esto uno se vuelve un personaje público. Al menos para según qué personas.
Me refiero, como no, a las madres, a los padres, a los tíos, a los abuelos, a los amigos sin puta idea de qué hacer con ese nuevo aparato que tienen y que se llama ordenador. ¿Quién no ha sufrido las incansables preguntas sobre cómo se subraya en el word o dónde hay que darle para meterse en el Google?
Propongo, pues, y siempre y cuando no haya algo parecido, en ese caso chapen esto, plasmar en este post todas aquellas frases que te hacen pensar varias cosas al escucharlas: como puede ser amor por la ignorancia o desesperación por la misma.
Un ejemplo: estaba yo el otro día estudiando en el salón y mi madre tenía el portátil al lado; ella, que quería cargar el MP3 me dijo que cómo se hacía y yo le contesté que metiéndolo en el USB y listo. Acto seguido soltó una frase que me hizo esbozar una sonrisa: ¿Pero no tengo que abrir el Google, no?
A cosas así me refiero.
Sé que es FEDA, pero intentad respetar, que puede salir un hilo gracioso.