Pues nada, el otro día estaba en un bar con unos amigos y la verdad que estaba bastante lleno por lo que no te enteras de quién tienes al lado. La cuestión es que estábamos fumando y yo para no molestar nunca con el humo suelo echar este hacia abajo y así no darle en la jeta a la peña... pero cosas del destino y de mi mala suerte el humo le dio en la cogorota/cara a un enano (espero que nadie se moleste por este calificativo)... pues al subnormal no se le ocurre otra cosa que pegarme una hostia en los huevos. Como soy pacífico y no quería montar una escena le pedí disculpas, que no me había dado cuenta pero el chaval lo único que hacía era darme pekeños empujoncitos e insultarme. Todo esto durante un minuto más o menos hasta que al final no pude más y le aparté con tan mala suerte que se cayó.
Resultado: Sus amigos llamaron al portero y me echaron.
Moraleja: No intentes hacer cosas por no molestar, no pidas disculpas y acepta siempre lo que te ordenen aunque sepas que no llevan razón.
Saludos!