El crimen perfecto, ¿Como lo hariais?

GaBoK

no se si sabreis que con la tecnología actual puedes cambiar de matrícula apretando un botón :S

y lo de entrar a un cementerio silvando, tontería, ay cientos de cementerios de pueblos en cualquier sitio que no hay guardia de seguridad ni nada, y nadie ha dicho que la operación sea individual, pero contal de llevarme la contraria tu platanero cualquier cosa..

kobrita

se eso y algunas cosas más que no cuentan

pero que si lo ves claro, hazlo y despues nos lo cuentas
desde alahurin

ademas tu has dicho sin matricula..... nada de botones y aparatitos

p4l0m0

comprate un atauZ

GaBoK

#153 CÓmprate una tilde

G4tts

Con un puñal de Hielo, le matas bien muerto, y cuando el hielo se derrita no quedara señal. Y 2, asegurarme que sea cuando esta en algun lugar, poco habitual.

kobrita

#155 biiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiien a mi enseñaron ese en clase pero mejor con pistola

GaBoK

#155 no lo habia pensado....

#1 preparate voy a por tí

M

Gabok no es mi problema q roces el absurdo cada vez que posteas (K)

GaBoK

monitolimpio no es mi problema que te tomes un foro de ocio el cual inmagino que no influye en tu vida, como algo personal

SuTaGaR

Vamos a preguntarselo al pueblo de Los Galindos si no hay crimen perfecto.

Aqui está la historia:

Por los tiempos en los que sucedió el crimen, el cortijo Los Galindos era una propiedad rentable y bien cuidada. Estaba al cargo de Manuel Zapata Villanueva, de cincuenta y nueve años, el capataz, y de su mujer, Juana Martín Marcías, de cincuenta y tres. Igualmente contaba con tractoristas y jornaleros fijos. La propiedad estaba situada a 3 kilómetros de la localidad sevillana de Paradas, entre las poblaciones de Marchena y Carmona, por la carretera llamada de El Palomar. Paradas es un típico poblado andaluz de calles limpias, muy embellecidas por sus moradores, que muy poco antes habían logrado el primer premio en un concurso convocado para galardonar a los pueblos mejor cuidados. La localidad de Paradas está situada a 500 kilómetros de Madrid y a 53 de Sevilla. El último censo que precedió al rosario de muertes que acabaría con cinco de sus vecinos fue de 10.106 habitantes.

Los Galindos era una propiedad de unas 400 hectáreas de tierra agradecida que daba buenas cosechas de trigo, cebada, girasol y aceituna. A los entonces propietarios, los marqueses de Grañina, les había llegado a través de la compra por el hermano de la marquesa, Francisco Delgado Durán, que la adquirió en 1950, cuando apenas tenía veinte años. A su muerte, ocurrida trágicamente en un accidente de automóvil en Portugal, el 19 de febrero de 1969, pasó a manos de sus padres, que la cedieron a su hija casada con Gonzalo Fernández de Córdoba y Topete, marqués de Grañina. Al cortijo se accedía por un camino de tierra rojiza que tenía algunos árboles. Al entrar, la vista se topaba al fondo con el cobertizo con balas de paja apiladas. A la izquierda estaban las viviendas, la más cercana y mejor surtida, la de los marqueses; y un poco más a la derecha, mucho más modesta, la que ocupaban el capataz y su mujer. Al otro lado del un patio cerrado con una tapia estaba la Casa de máquinas, donde se guardaban los aperos de labranza y junto a ella el granero, todo dispuesto alrededor de un patio por el que circulaban sin dificultad los tractores.

La mañana del 22 de julio de 1975, el tractorista José González, de veintisiete años, trasladó la orden de Zapata al recadero del cortijo, Antonio Fener, para que marchara al campo con los otros labradores a "acuchillar" a los pies de los pinos, lo que no era muy habitual. Quedaron en el cortijo solos Zapata, Juana y José hasta pasado el mediodía, cuando José fue requerido probablemente a instancias del asesino para ir al pueblo a recoger a su mujer, Asunción Peralta, de treinta y cuatro años, que había trabajado como temporera en Los Galindos antes de casarse. Seguramente aquel encargo tenía como objetivo aclarar algún sucedido en la finca o debatir un secreto del que Asunción participaba. Mientras José González se dirigía a su casa en su coche SEAT-600 color crema, en Los Galindos se desató la tragedia. Zapata, que confiadamente hablaba con el asesino, sentado en su despacho, no esperaba en modo alguno que este le agrediera con el trozo de la pieza rota de la empacadora con la que jugueteaba hacía un rato. Inesperadamente, el criminal atacó al capataz por la espalda golpeándole el cráneo hasta destrozárselo. Debía obedecer a un plan preconcebido porque acto seguido se dirigió en busca de Juana a la que conocía de sobra, que le había visto entrar y conversar con su marido, por lo que no podía dejarla viva. La atacó con la misma arma. Pero esta vez de frente, golpeándole el rostro varias veces hasta que le quedó aplastado, con el aspecto de una máscara de goma. El asesino no actuaba solo y así quedó patente al observar el rastro de sangre que dejó en el suelo. Primero un enorme manchón correspondiente a un cuerpo arrastrado pesadamente y después un goteo que marca cómo el cuerpo fue izado, probablemente sujeto por pies y axilas hasta ser depositado en el dormitorio, donde también dejaron la pieza de la empacadora con la que la habían matado. Al salir, los asesinos cerraron la puerta con un candado. Instantes después regresó González que venía con Asunción. Fueron recibidos por los criminales que les apuntaban con la escopeta de Zapata. Sin intercambiar apenas palabras –los crímenes se sucedieron de forma muy rápida, probablemente entre las tres y las cuatro de la tarde—, nada más salir del coche, la pareja fue empujada hacia el cobertizo. Allí fueron vilmente asesinados a tiros y golpes así como rociados de gasolina y gas-oil. En ese momento debió llegar alguien inesperado: era el tractorista Ramón Parrilla, de cuarenta años, que se había quedado sin carburante. De repente se vio encañonado por una escopeta. Trató de huir pero inmediatamente le dispararon. Se protegió con los brazos donde recibió dos descargas. Sangrando y con los brazos destrozados dejó un reguero de sangre por el itinerario de su escapada imposible, primero hacia el interior del casería y, finalmente, hacia la salida de la finca, por el camino de tierra roja. Pero no pudo ir muy lejos: en una zanja, junto a un árbol, se derrumbó herido de un disparo que le entró por la espalda. Allí caído fue rematado sin piedad. Debían de ser las cuatro de la tarde pasadas. Los asesinos cubrieron el cadáver de Parrilla con paja, siguiendo un extraño ritual que les llevó a ocultar el cuerpo de Zapata, a encerrar el de Juana con un candado, y finalmente a quemar los del matrimonio González.

Rastros de sangre en Los GalindosA las cuatro y media, una espesa columna de humo se levantaba del caserío de Los Galindos alarmando al recadero Fenet y a los otros trabajadores que corrieron hacia la casa porque pensaron que estaba ardiendo. Al llegar descubrieron la paja del cobertizo que se quemaba con extraña violencia. Se acercaron y notaron que debía estar empapada de combustible porque ardía de una forma especial. Además, de las pacas se desprendía un denso y sospechosos olor. Buscaron al capataz sin encontrarlo, pero en seguida vieron la sangre, casi a la vez que descubrían los cadáveres consumidos del matrimonio González. Ni siquiera podían imaginar que eran ellos. Inmediatamente fueron al pueblo a dar aviso a la Guardia Civil. El comandante del puesto, un cabo, acompañado de un número, se desplazó al cordel puesto, un cabo, acompañado de un número, se desplazó al cortijo donde pudo comprobar el extraño caso que se le presentaba. Tras recorrer las dependencias de la vivienda del capataz siguiendo los rastros de sangre llegaron ante la puerta cerrada con el candado. Sin saber qué podían encontrarse al otro lado, descerrajaron el candado de un tiro. Una vez abierta la puerta se encontraron con la macabra escena de Juana tendida en la cama con el rostro aplastado. Habían mucha sangre, y ya los vecinos del pueblo, que se habían acercado en gran cantidad al saber que algo raro sucedía en Los Galindos, habían descubierto que el reguero que iba hacia fuera terminaba junto al camino de acceso, exactamente en un lugar oculto por un montón de paja. Fue suficiente trastear un poco allí para que quedara al descubierto el cadáver del tractorista Parrilla, el único que resultaba reconocible.

El crimen de Los Galindos fue un asesinato complicado, lleno de matices que no habría sido difícil de resolver si hubiera ocurrido en una gran urbe con toda clase de medios para la investigación criminal, pero en Paradas, un pueblecito desprevenido, con un pequeño cuartel de la Guardia Civil, resultaba casi imposible enfrentarse a tanta complicación. Además, los vecinos andaban toqueteándolo todo: la pieza de la empacadora que fue el arma criminal, el SEAT-600 de donde sacaron la escopeta que los asesinos habían abandonado allí tras los crímenes, las ropas y cuanto podía ser susceptible de ofrecer una pista a los investigadores. Quedaron conculcadas todas las reglas que es preciso seguir para salvar huellas y además se sacaron conclusiones precipitadas.

Tanto los vecinos como la Guardia Civil encontraron cuatro cadáveres mutilados y fríamente asesinados y echaron en falta al capataz de la finca, Manuel Zapata. No aparecía por ninguna parte. Así las cosas parecía lógico pensar que era el responsable de tanta muerte. Por eso todos los efectivos se pusieron inmediatamente a buscarlo. Mientras se había dado aviso de lo que había ocurrido a los marqueses, presentándose en seguida el marqués, Gonzalo de Córdoba, y el administrador de la finca, Antonio, su mano derecha. Pero en aquel momento lo único que importaba era encontrar a Manuel Zapata, a quien se le creía perdido en el campo, loco y armado. Aunque lo buscaron incansablemente, no lo encontraron. Peinaron la finca, revisaron las construcciones del caserío y patrullaron los alrededores sin resultado. Sorprendentemente, al llegar la oscuridad, el marqués y su administrador pasaron la noche solos en Los Galindos. Durante el día 23 se siguió buscando sin resultado. No fue hasta la mañana del 25 cuando el cuerpo de Manuel Zapata fue finalmente hallado, aparentemente en el mismo lugar donde lo habían arrojado los asesinos: detrás de la Casa de máquinas, muy cerca de la pared, en el hueco de un árbol, cubierto de paja. En un lugar imposible para estar oculto tanto tiempo. Precisamente allí había orinado entre tanta búsqueda un policía municipal de Paradas sin percatarse de que estaba el cadáver de Zapata, aunque a lo peor fue puesto allí con posterioridad. Podemos considerar casual la última muerte, la de Parrilla, pero los dos matrimonios estaban relacionados. Estos cuatro sabían algo comprometedor que se llevaron a la tumba.

Más de veinte años después, ninguna de las numerosas incógnitas que rodean el quíntuple asesinato de Los Galindos ha sido aclarada, aunque el tiempo no ha transcurrido en vano: la hipótesis policial que señalaba como autor material al tractorista José González, que según esta habría matado a los demás y se habría suicidado después, fue desmontada y desmentida. Es la única justicia que se ha hecho en el caso Los Galindos.

Fuente: http://agosto.libertaddigital.com/articulo.php/1276230581

PD: Como dicen por otros post, disolverlo en acido. Bien, es prácticamente imposible disolver un cuerpo en acido sufúrico por muy fuerte que sea. Comprobado cientificamente.

kobrita

en efecto........
lo que queria decir antes con que no hay crimen perfecto sino malos forenses se demuesra aqui.
lo que no cuentan en los periodicos para vender, es que los inutiles de los primeros policias borraron las primeras huellas y una de las más importantes unas marcas de avioneta y las borraron con sus coches porque creían que no merecian la pena

no existe el crimen perfecto

Spiritu

el crimen perfecto EXISTE. De verdad creeis que todas las personas que hay desaparecidas (que son un buen montón) simplemente se perdieron? xD el 60% por ciento está bajo tierra victimas de un crimen perfecto...

para que sea perfecto el cadaver debe desaparecer, así al tiempo dejan de investigar y se acabó

El mío:

Supongamos que la victima me hace algo imperdonable, me destroza la vida a mi, o alguien de mi familia. Lo estudio durante años, 2 o 3, sus costumbres, que suele hacer los findes, sus horarios, sus vacaciones... Despues busco el momento en el que esté realtivamente solo y en un lugar apartado y en el cual sea facil esconderse (camping en el monte o algo similar?). Totalmente enfundado en un traje de camuflaje (pasamontañas, wantes, etc) Cojo mi arco (que habria escondido dias atras en el monte) desde unos 30m, entre los arboles, él no puede verme, pero yo tengo una clara visión del objetivo, hay poco viento, tenso mi flecha fabricada artesanalmente y disparo al pecho, sin dudar, vuelvo a tensar otra flecha y segundo impacto!! cuando el ojetivo está en el suelo, decido asegurarme y disparo un tercer proyectil apuntado hacia la cabeza, BAM! trabajo hecho. Me quito la ropa (debajo tengo ropa normal) y la pongo junto al arco en una especie de hoyo impregnado de gasolina, tiene un dispositivo de encendido con retardo (15min), salgo tranquilamente de allí, para cuando llegue la policia yo estaré en mi casa celebrando la victoria

No quiero que el cadaver desaparezca porque para mi es una victoria moral que no puedan inculparme, es fruto de muchos años de trabajo, mi obra de arte

estoy enfermo? xDDDDDDd

kobrita

no, simplemente que la línea de investigación no fue la adecuada porque es imposible que no quede huellas.
si decimos como concepto que si existe el crimen perfecto pues no
hace siglos sería posible, ahora no

M

#162 Y es necesario el maravilloso dispositivo incendiario de 15 minutos? Si alguien encuentra el cadaver en esos 15 minutos y coge tu ropa y tu arco, ya tendrán por donde tirar de la cuerda :)

malka

lo k diga kobrita va misa que para eso es criminologo, director de seguridad y no se k ostias más

DanGeRouS

facil, regalandole un paquete de tabaco cada semana.

es una muerte lenta, pero efectiva.

xCe

#166 con 1 pakete de tabaco a la semana creo q te mueres tu antes q el xDDDD

DanGeRouS

#167 la cosa es que se enganche, luego los compra el otro xDDDDD

B

MV, tu comunidad de asesinos.

kobrita

sssssssssssssssiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiii

G4tts

Otra opcion para matar a alguien... es tirarlo a un sitio con unos 12 gorrinos hambrientos, cortado a pedacitos, y dura menos de 5 minutos. Desaparecen los huesos inclusive. Con unos dias, harias desaparecer sangre y demas cosas, suponiendo que nadie iria a inversigar ese sitio y te de tiempo a limpiar la sangre.

Ya sea 1 hora, 2 horas, o 1 dia.

Si lo cortas a pedacitos en una zona de plastico, para poder luego plegar el plastico y que no salpique sangre, se haria follao.

PD: esta es de una gran peli, Snatch

kobrita

si los elementos de la sangre no se borran durante muchos años sería buena idea,ademas de que son indestructibles.

por lo demás está bien
lo que más cachondo me pondría es comerme luego jamoncito de ese cerdo

SiL3X

Me llevaria a sonik0rz el me guiaria , gracias a su tremendo poder de ver por las paredes ^^

rOfEllOs

Conium maculatum
Insulina
Furfural
Un chupito de Cilit Bang

GaMuSSo

Matas a cualquiera, y dices que ha sido un negro. no te pillan 100%

G4tts

#175 no va desencaminado, hacer que esa persona se suicide.

V

Si quieres ir a un país asiático a matar a alguien , lo aconsejable es que "disfrazarte de chino" , (ej tipo carlos latre).

Bueno , hoy en día hay camaras por todos los sitios , por tanto lo mejor es ir disfrazado , una gorrita , barba postiza y bigote pero que no cante mucho , tp vienen mal unas lentillas. (por si las camaras)

vas y lo matas en su portal o si es en un edificio entras con guantes transparentes y le llamas a la puerta y le disparas

Otra cosa es ponerse doble ropa , es decir , llevar 2 pantalones encima puestos y 2 o 3 camisas encima (lleva una bolsa en el bolsillo una vez consumado en acto)

Esto es importante , ya que si ha habido algún testigo , si ven el color de ropa puedes caer , en cambio si una vez consumado el acto te vas a otro lugar (un jardín o algún sitio donde estés seguro de que nadie podrá verte) y te cambias de camisa y pantalon , y lo intercambias todo o lo guardas en una bolsa , es mas dificil que te cojan.

Luego creo que sería importante deshacerse de los zapatos (si has pisado barro o algo que te pueda relacionar) , y de la ropa (por el humo del disparo que se queda en la ropa) y te das una ducha. y mejor deshacerse del arma

Eso si tienes alguna relacion con la persona , sino no haría falta tanto.

mas o menos así.

V

tb muy importante no mandarle sms ni mensajes diciendole que le vas a matar etc.

Pd: hace cosa de 1 año a un criminólogo le preguntaron si era posible realizar un crimen perfecto y dijo "rotundamente sí".

yo creo que si se puede , pero hay que tener sangre fría.

kobrita

#179
¿que criminologo? nombres y datos
¿donde estudio? ¿en cercedilla de la sierra o en bollullos de arriba?

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