#45 eres un calco de Jason Statham.
Como haces para compaginar tu ruda imagen con los chorrazos de aceite que pierdes?
#45 eres un calco de Jason Statham.
Como haces para compaginar tu ruda imagen con los chorrazos de aceite que pierdes?
#62 En serio, ¿no te da un poquito de vergüenza como persona hacer creer a la gente que eres una mujer, teniendo los huevos negros?
#64 Pues, te digo lo que le dije a mi madre: no. Y si tienes algún problema, díselo a mi coñito virtual.
No me puedo creer que la gente se tome a coña lo de la melena y las entradas.
Te puedo decir que la mayoría de tios que han llevado melena desde pequeño (dónde me encuentro yo) tienen entradas.
Y es casi más factible encontrarte a un tio con melena que tiene entradas, que alguien que ha tenido siempre el pelo corto y como mucho se ha peinado con la gomina para arriba.
Y sí, hay una sutil diferencia entre entradas y alopecia o principio de alopecia.
Yo también me rapé hace 2 semanas y aplicando cierta filosofía mental voy entendiendo muchos pasos del budismo por ejemplo. Vas comprendiendo poco a poco que todo es pasajero, y que te puedes desprender de cualquier cosa mientras te tengas a ti mismo y fluidez mental. Ropa, dinero, posesiones materiales... dan igual. Les han dado un valor artificial y nos han convencido de que ese lo deseamos cuando no es nada más que valor añadido por otros para escalar en el sistema económico capitalista.
Comprendí y pensé en muchas cosas sólo por un corte de pelo. Cuando me ponga serio la lio.
#69 Vaya, yo llevo unos años rapandome (hara cosa de 6 o 7 meses que me estoy dejando el pelo mas largo otra vez) y no he transcendido nada :/
yo estoy barajando lo de raparme con tal de que se me dejen de enredar los pelos que se me caen por la noche con los pelos del culo
es super incómodo sacarte eso luego
iiiiññññññññ
#69 Pues yo cada vez que me recorto el pelo y me quitan 5 dedos cortándome las puntas aplico cierta filosofía mental y voy entendiendo muchos pasos del camino del samurái, por ejemplo. Vas comprendiendo poco a poco que todo es corrompible, y que debes arrancar la mala hierba para que florezca otra nueva, mucho más pura, jovial y duradera. Poder, dinero, vanidad... Nuestros superiores les han dado un valor artificial y nos hemos convencido de que eso lo deseamos cuando no es nada más que la podredumbre del alma provocada por este régimen deshonesto en el que gobiernan los que desean escalar en el sistema económico capitalista.