La guionista y actriz francesa, Chloé Fontaine, demuestra, en sólo dos minutos, cómo se puede violar dentro una pareja desde una perspectiva natural y cotidiana. El cortometraje, titulado Soy ordinaria, pone en jaque una escena que podría suscitar el "ése podría haber sido yo" o "eso me ha pasado a mí".
En la imagen, una pareja de jóvenes aparecen tumbados en una cama. Él propone ver una película, en concreto, Irreversible, una obra de Gaspar Noé que habla de la violación a Monica Belluci. La chica, con cara de asco, le responde: "Ay no, esa no. ¿Qué quieres, vomitar?". El chico, le reta: "Eres difícil de satisfacer".
Tras unos instante de silencio, el joven la mira fijamente y le dice: "¡Qué guapa eres!" Ella, sonríe. Después, se pone encima de ella y le besa. Tiene ganas de acostarse con ella, y ésta, entre risas, le dice: "No, no me apetece".
Ante la negativa, el chaval recurre al chantaje emocional y le suelta: "¿Qué pasa? ¿Ya no me quieres?" La chica le vuelve a mirar fijamente y explica, por si fuera poco, que simplemente no le "apetece hacerlo".
Pero al chico le da igual. Lo tiene decidido: la viola. ¿Por qué es una violación? Básicamente porque la chica refleja desesperación y se queda quieta, se deja hacer. Cuando finaliza, él ríe, está contento. La chica, no.
Él le da un beso y ahora sí, verán la película que ella ha vivido sin saberlo.
http://www.publico.es/sociedad/agresion-sexual-corto-demuestra-violar.html
