El niño se pone a hacer algo que no debe / que no queremos que haga, y le decimos que pare y que no haga más eso:
Niño 1: El niño para.
Niño 2: sigue haciéndolo. Elevamos el tono de voz y mucho más serio. Niño Para.
Niño 3: sigue haciéndolo aún repitiéndoselo enfadados, empezamos las amenazas. Niño Para.
Niño 4: el niño sigue tocando los cojones. Cogemos al niño y le castigamos (incluso alguno le da una hostia). Niño Para.
Niño 5: el niño castigado monta el pollo, la situación es mucho peor, etc...
Yo era de los que pensaba que si tenías el Niño 4 o 5, con el tiempo y buen hacer conseguirías que fuera el Niño 1, o 2, o uno de los anteriores... pero el tiempo me ha hecho darme cuenta de que eso depende también del niño, no sólo de ti como educador. Porque te puede nacer niño inamovible, que sea Niño1 y acate todo a la primera lo que le digas (conozco a un niño así ) y que sea un niño 4-5, que no "aprende la lección", que siempre te planta cara, y que da igual lo que hagas.
¿Qué ocurre aquí? Pues que muchos padres piensan que "a mi me respetan" gracias a ser perseverantes con sus estrictas normas, nunca dar su brazo a torcer, e imponer castigos/enfados/loquesea. Y eso puede ser así porque hayas tenido Niños 2-3, o incluso 4, y con el tiempo hayan ido "aprendiendo la lección".
Pero normalmente al Niño 4-5 no le vale el castigo, la amenaza o el grito, le suele vale el re-dirigirle con otros métodos, que suelen consistir en calmarlos. Es un tren a toda velocidad a punto de chocar, y si tú eres otro tren en su misma dirección, el accidente va a ser monumental y es mucho peor que si pones vías y tierra para que de alguna manera frene y el impacto sea menor.
¿Qué ocurre cuando un padre de los de "a mi me respetan" ven a padres de Niños 4-5 actuar así, calmándolos? Pues que nos ven (sí, incluidme a mí aquí) como que somos unos blandos, que los niños nos toman por el pito del sereno, y eso ha sido por no ser como ellos y no ser estrictos. Y ya os digo yo que llegas a este camino después de comprobar que no vale para nada lo de ser más estrictos y hay niños con los que necesitas otras tácticas.
Así que, como han dicho antes, depende en parte del niño y depende de los padres. Y aunque aquí el ejemplo le he contado con esto, podría extrapolarlo a muchas otras cosas, como que duerma en su cuna/habitación o la nuestra... porque aquí estarán los padres que lo metan en su cama desde el primer día y "ya lo sacaremos", los que optarán por todo lo contrario, y todos los grises de en medio, que van desde el probar varios días a dejarle sólo y algunos lloros y el "vaya parece que no va mal", y el pasar insomne noche tras noche y lloros eternos porque la cuna tiene pinchos y al final tu solución sea "lo meto en mi cama".
Por cierto, lo de que "aprendan a dormir solos" siendo tan pequeños, me da la sensación que es más por comodidad nuestra como adulto que por ellos mismos. Yo entiendo que eres pequeño y te da miedo todo, la oscuridad, estar sólo, y que es normal que te acompañe mamá o papá en la cama hasta que te duermas. Lo mismo lo habéis conseguido con bebés, pero no sé yo cuando sean un poco más mayores y más conscientes si no os querrán tener a su lado hasta dormirse.
Con la mayor de 7 años es así, ella sabe que nos tumbamos con ella y que cuando se duerme nos vamos, pero nos pide que nos quedemos porque no le gusta estar sola, se agobia. Es algo esclavo para nosotros, obviamente, porque siempre tiene que ir uno con ella y otro con el pequeño, pero vamos, entiendo que es algo evolutivo y tarde o temprano dormirá ella sola.