Mi problema es que el otro día surgió una conversación con un compañero mío de clase (por aquí presente). La conversación trataba sobre cómo nos limpiábamos el culo después de cagar y, para mi sorpresa, él se lo limpiaba sentado metiendo la mano por detrás. Al instante que esta información entró por mis conductos auditivos eché a reir. Mi compañero me miraba con cara de WTF.
Entonces empecé a preguntarme si realmente era él el rarito o por el contrario lo era yo. Pregunte a la gran mayoría de los compañeros de mi clase y todos, a excepción de 2, se limpiaban el fruto del señor sentados.
Marché a casa meditando sobre esta anécdota y asombrándome ya que después de 11 años de relación de amistad con mi compañero aún no sabía que él y posiblemente gran parte de la población mundial se limpiaba el culo sentado.
Después de todo esto, decir que pienso seguir el resto de mi vida limpiandome el ojal de pie.