Marta 24 años pierde la visión por Sosa Caústica.

¿Sabéis cuando a veces te hablas mal a tí mismo?Cuando dices “esto se me da fatal, soy una inútil o esto es imposible”; pues tengo una amiga que cuando la conocí hace años, cada vez que algo así salía de mi boca, ella me decía: “Marta, anúlalo”. Y desde entonces me lo he llevado siempre conmigo. El cerebro es una esponja y absorbe todo lo que le presentes, especialmente cuando viene de uno mismo. Es como la fábula del elefante. Había una vez un elefante que fue capturado por un circo cuando todavía era un bebé; trató de escapar de su jaula muchas veces, pero al ser tan altos los barrotes y él tan pequeño, no lo conseguía, así que un día se rindió. Tras crecer y convertirse en un gran y hermoso elefante, los espectadores se preguntaban por qué no huía. La razón es que después de tantas veces diciéndose que jamás escaparía, el día que finalmente podría haberlo logrado, ni siquiera lo intentó, pues él mismo había convencido a su cabeza de que era imposible.
Lo que me vengo a referir es que hay que ir con cuidado con lo que te dices a tí mismo, pues el cerebro es como un niño inocente e ingenuo y se lo cree todo. Y por eso hablo tanto de mimarse a uno mismo, porque las cosas negativas que nos decimos tienden a prevalecer más que las buenas. Las palabras “no puedo” o “imposible” solo deberíamos usarlas si nos vamos a comer una sopa con tenedor. Por eso, y aunque tengáis bajones, daros el tiempo de aislaros pero no dejéis que vuestra mente cree unos barrotes de los cuales es difícil escapar. O si tenéis la oportunidad, adoptad a un elefante naranja como el mío que no se separa de mí, ni cuando me ducho y me da todo el amor que yo a veces no me se dar.
Os dejo una canción obligada para los días anímicamente flojos o días de introspección. Poesía pura narrada por una preciosa voz. De nada!.
“Ríe cuando puedas”-El Chojín.
¡¡Feliz lunes bellos elefantes y elefantas!!