¿Ustedes creen que Jesus existio?

C

¿De dónde viene el término "pagano"?

Con el edicto de tolerancia del emperador Constantino I y desde la época del emperador Teodosio I, en el siglo IV , el cristianismo se convirtió en la religión oficial y obligatoria en el Imperio romano. Los cambios religiosos se produjeron de manera inmediata en las grandes poblaciones de Roma, pero tardaron en llegar a los lugares más alejados y menos poblados. Las zonas rurales eran llamadas pagus y sus habitantes paganus.

PENATES

Di penates o en forma abreviada penates eran, en la mitología romana, originalmente genios protectores del almacén del hogar. Posteriormente, se convierten en dioses de los hogares brindando protección a toda la casa (penates familiares o menores), existiendo también los protectores del Estado (penates públicos o mayores). Estaban emparentados con los lares, los genios y las larvae. Los penates son mencionados por Propercio

LARES

Los lares eran deidades romanas hijos de Lara (o Larunda),1​una de las náyades, y el dios Mercurio (algunas fuentes mencionan a Júpiter)1​ cuyo origen se encuentra en los cultos etruscos a los dioses familiares.

La religión de la antigua Roma presentaba dos vertientes: por un lado, los cultos públicos o estatales y, por otro, los cultos privados o domésticos. Dentro de esta segunda vertiente se sitúa la adoración de los llamados dii familiaris o dioses de la familia. Entre estos se encuentran los lares loci, cuya función primordial era velar por el territorio en que se encontraba la casa familiar

Lar de bronce del siglo I (M. A. N., Madrid).


CAMINO DE SANTIAGO: DIVINIDADES PRECRISTIANAS CONVERTIDAS EN SANTOS

Camino sobre las facultades protectoras y peticiones hechas a distintos santos y santas que el peregrino se puede encontrar en sus distintos santuarios a lo largo del recorrido, en lo que es claramente una continuación -o mejor dicho, una sustitución- de las antiguas atribuciones de las antiguas divinidades precristianas.

http://iberiamagica.blogspot.com/2017/08/los-santos-cristianos-y-las-antiguas.html

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C

SIGAMOS CON EL CAMINO DE SANTIAGO

Había dos motivos fundamentales e íntimos para encomendarse a los santos y, de manera muy especial, al señor Santiago: los mismos que hay en la actualidad entre los creyentes sinceros. El primero de ellos era reverenciar al santo en cuestión, en tanto que especialísimo intermediario con la Gloria, para obtener determinados favores que beneficiarían a sus devotos con carácter sobrehumano: curaciones, liberaciones, ayudas pecuniarias, cambio radical de las circunstancias existenciales. Del mismo modo, dicen que santa María Magdalena es especialista en preservar de las viruelas; que san Antonio de Padua ayuda a encontrar lo que se ha extraviado; y que san Pancracio, según sus numerosos fieles, que incluso compran sus imágenes en los baratillos callejeros, sigue asegurando en nuestros días da salud y el trabajo". No constituyen más que algunos ejemplos puntuales de una Leyenda Dorada millonaria en santos protectores de los creyentes, aptos para conceder todo tipo de favores y capaces de tender su mano a todas las actividades y profesiones, como hacían en su día los dioses lares y penates de la Antigüedad clásica grecorromana.

http://iberiamagica.blogspot.com/2017/08/los-santos-cristianos-y-las-antiguas.html

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C

Los primeros cristianos y los dioses de Roma

EN UNA carta a Trajano, emperador de Roma, Plinio el Joven, gobernador de Bitinia, le comentó: “He seguido el siguiente procedimiento con los que eran traídos ante mí como cristianos. Les pregunté si eran cristianos. A los que decían que sí, les pregunté una segunda y una tercera vez amenazándoles con el suplicio; los que insistían ordené que fuesen ejecutados”. Pero Plinio también escribió: “Decidí que [otros] fuesen puestos en libertad”. ¿Por qué? Porque renegaron de su fe maldiciendo a Cristo y adorando la estatua del césar y las imágenes de los dioses que el gobernador había llevado al tribunal.

Los cristianos primitivos sufrieron persecución por no dar culto al emperador y a las imágenes de los dioses. Pero ¿qué sabemos de las demás religiones? ¿A qué divinidades veneraban, y qué opinaban de ellas los romanos? ¿Por qué se calificaba de delito el que los cristianos se negaran a ofrecer sacrificios a las deidades de Roma? Contestar estas preguntas nos ayudará a afrontar situaciones parecidas que hoy ponen a prueba nuestra lealtad a Jehová.

Las religiones del imperio

Las deidades veneradas en el imperio eran tan diversas como los idiomas y culturas que este abarcaba. Aunque a los romanos les resultaba raro el judaísmo, le otorgaron la designación de “religión lícita”, que le garantizaba la protección oficial. En el templo de Jerusalén se ofrecían a Dios dos sacrificios diarios (dos corderos y un toro) a favor del césar y su nación. A los romanos les tenía sin cuidado si esos sacrificios eran para aplacar a una o varias divinidades. Lo que les importaba era que daban prueba suficiente de la lealtad de los judíos al imperio.

El paganismo dominaba en todo el imperio y adoptaba múltiples formas en cada localidad. La mitología griega era ampliamente aceptada, lo mismo que la adivinación. Y de Oriente habían llegado las llamadas religiones mistéricas, o de los misterios, las cuales prometían inmortalidad, revelaciones directas y unión con las divinidades mediante ritos místicos. Estos cultos se habían esparcido por todo el imperio. Para los primeros siglos de nuestra era se había vuelto también muy popular la veneración al dios Serapis y la diosa Isis (de Egipto), a la diosa pez Atargatis (de Siria) y al dios solar Mitra (de Persia).

El libro de Hechos ofrece claras indicaciones del ambiente pagano que rodeaba a los cristianos. Por ejemplo, en Chipre, el procónsul romano tenía por asesor a un hechicero judío (Hech. 13:6, 7). En Listra, la gente tomó a Pablo y Bernabé por los dioses griegos Hermes y Zeus (Hech. 14:11-13). En Filipos, Pablo se topó con una sirvienta que practicaba la adivinación (Hech. 16:16-18). En Atenas, dijo que sus habitantes parecían “más entregados que otros al temor a las deidades”, y que había observado un altar con la dedicatoria “A un Dios Desconocido” (Hech. 17:22, 23). En Éfeso, vio lo arraigado que estaba el culto a Ártemis (Hech. 19:1, 23, 24, 34). Y en la isla de Malta fue aclamado como ser divino porque no se enfermó al ser mordido por una víbora (Hech. 28:3-6). En un ambiente así, los cristianos necesitaban mantener los ojos bien abiertos para no hacer nada que contaminara su adoración.

https://wol.jw.org/es/wol/d/r4/lp-s/2010365

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Ronjoujoujou

Una lectura muy curiosa.

C

Un texto sobre la posible influencia griega en el mito de Jesús. Comparación de Hércules y Jesucristo:

https://esenciasdemaria.blogspot.com/2014/07/el-hijo-de-zeus-y-jesus.html

2 1 respuesta
Ninja-Killer
#209Jetxot:

Y antes de romanos eran templos iberos

Dudo bastante que llegaran a existir templos íberos dedicados a la adoración de Dioses, o adoración de lo que sea. De hecho dudo que hubieran templos a secas xDD Bueno, alguna excepción habrá por ahí fijo..

#211 Podrías haber abierto un hilo aparte, daba para ello gañán. Aunque sea un copy&paste descarado de la Wikipedia, pero bueno.

1 respuesta
Jetxot

#216

Llamalo templo, llamalo tumulo, llamalo pedrusco de adoracion....

MiNmbreNoCab

#215 Yo creo que existe bastante consenso en que el cristianismo es un plagio evidente de conceptos filosoficos pre/socraticos y orientales mezclados a batiburrillo xd.

2 respuestas
Ronjoujoujou

#218 HAsta que ves a ciertos usuarios agarrarse a la palabra de dios, negando lo demás como si no hubiese un mañana.

Ojalá se planteara la religión así.

C

#218 Muchos estamos conscientes de ello. Pero hay personas muy capaces que siguen religiones como la mormona o la católica. Y creo que todavía en la actualidad, esas religiones aportan un gran beneficio, ya que personas que serían perversas sin ideas religiosas, son muy bondadosas, impulsadas por su creencia. Llegará el día en que la gente no necesite ninguna religión para portarse bien.

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