#24 En realidad eso es un mito que se creo para demostrar lo rápido que se propagan los bulos por internet.
cucarachas y gusanos principalmente, el asco y la repugnancia que siento al ver uno es sencillamente irracional, me entran temblores en el cuerpo
aunque tampoco es que me hagan gracia otros insectos tipo saltamontes, cienpies...
Pues yo ayer estaba pinchando insectos para un trabajo de plagas jajaja y relacionado con el tema de las fobias tengo una amiga que en una acampada de noche se le metió una larva por la oreja y desde entonces le dan nauseas los insectos en general hasta el punto de vomitar.
#28 A mi me flipa la gente que dice que le tiene un miedo terrible a los insectos y luego los ves comiendo gambas tan tranquilamente, cuando tampoco hay tanta diferencia. Cómo se nota que lo que es socialmente aceptado se nos mete en el subconsciente.
A las arañas siempre les tendré cosa, pero fue el verano pasado cuando descubrí que soy tripofóbico :/
#43 Pues a mi me parecen majestuosas, y lo digo en serio.
Los leones de los insectos.
Las avispas en cambio podrian explotar todas al unisono con sus muertos.
¿Un entomófobo es un árbol que odia a los gays?
Las escolopendras son fruto de satán, de los pocos que me produce verdadera repulsión.
A mí me fascinan todos los bichos, pero los que pican me dan respeto. Menos lo mosquitos, cómo odio a esos hijos de puta.
#43 es el ÚNICO insecto que me da grimilla. Mira que me encanta observarlos y ponerles la mano para que se suban, pero con esos...pffffff
Las putas palomillas, porque su comportamiento es torpe e imprevisible.
Me da puto asco verlas quietas y de repente volverse locas chocándose con todo y haciendo ruido con las ostias que se pegan, luego vuelan directas hacia ti sin saber muy bien porqué, luego te acercas y están quietas, aparecen y desaparecen. Y encima son rechonchas.
No hay nada mejor que tener una buena plaga de arañas por las paredes y por el suelo para así limpiar todo de mosquitos de mierda.
#58 Antes tenía salamanquesas dentro de casa, criaron aquí y como no molestaban las dejé. Ni una araña, ni un mosquito.
